Gira. El presidente chino Xi Jinping y su esposa Peng Liyuan llegaron a Berlín.
La canciller alemana, Ángela Merkel, se reunió con el presidente chino, Xi Jinping, quien aspira a consolidar una relación de socio estratégico de la potencia europea y cuya visita a Berlín precede a la cumbre del G20, en Hamburgo.
China y Alemania están llamados a convertirse en "ejemplo modelo" de una "cooperación global y exitosa" entre esas dos grandes economías, apunta Xi en una columna de opinión publicada ayer en el diario conservador "Die Welt".
El propósito del líder chino es "intensificar, hasta el más alto nivel", sus relaciones con Alemania, prosigue el artículo, en el que hace hincapié en la responsabilidad con que ambos países asumen sus compromisos "con la paz, la estabilidad y el bienestar".
La visita de Estado de Xi se produce en un momento de alto calibre estratégico, después de que Beijing se colocara al lado de los defensores del Acuerdo de París contra el cambio climático, que Merkel pretende salvar, pese al abandono de Estados Unidos.
China ha expresado su deseo de dar continuidad a los "consensos" adquiridos en la última cumbre del G20, celebrada en su sureña ciudad de Hangzhou, bajo la presidencia de turno china, de la que Alemania toma el relevo este año.
A falta de que se confirme su agenda en Hamburgo, se estima que Xi tratará de mantener una reunión bilateral con el presidente estadounidense, Donald Trump, centrada en la amenaza norcoreana, las fricciones en el mar de China Meridional o la actual situación del comercio bilateral.
