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Opinión - Miscelánea

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ADELA CELORIO

A la salida del bar nos hallamos con la novedad de que el auto tenía estrellada una de las ventanillas traseras. Entre otras cosas, la mochila de André había desaparecido.

El que viaja debería estar dispuesto a ser influido

por lo que acontezca en el viaje.— F. Reyes Heroles

“Llego a la Ciudad de México el próximo viernes”, anunció André, apuesto parisino con quien coincidí durante mis vacaciones en playas caribeñas; cumplía su promesa de visitarme en ésta capital. “Estaré solo unos días y además de verte, me gustaría conocer las Pirámides y Xochimilco”, adelantó. Encantada, me dispuse a ser buena guía. Preparé cuidadosamente las excursiones y llegado el momento me arrojé a la circulación colapsada de esta ciudad para ir a recibirlo al aeropuerto.

“Antes de llevarte al hotel, comeremos en La Condesa, es una de las zonas más vibrantes de esta capital”, le informé. Por esa ruta encontramos el pavimento de las calles levantado por no se qué obra en proceso, lo que nos obligó a saltar entre terraplenes y zanjas abiertas hasta encontrar un lugar accesible donde la comida resultó mala y no había terraza para fumar, cosa que desesperó a mi amigo, es un fumador compulsivo. “El café y el postre lo tomaremos en una linda terraza”, ofrecí. Volvimos a saltar entre zanjas y terraplenes de regreso a mi auto. Lo encontramos inmovilizado con una 'araña' en la llanta y una multa en el parabrisas. “Espérame aquí”, le pedí a André y busqué el OXO más cercano para pagar los seiscientos pesos de la infracción. Llamé al teléfono indicado pidiendo que vinieran a retirar el freno autoritario. Tuvimos mucha suerte, sólo tardaron dos horas y media en llegar a liberarme. “Tu ciudad es muy conflictiva”, observó André, cuyo rostro, con la barba crecida, comenzaba a lucir sombrío. “Nada que no se arregle con unas margaritas en Polanco y ahora sí, te llevo a tu hotel para que descanses y nos vemos mañana”, comenté.

A la salida del bar nos hallamos con la novedad de que el auto tenía estrellada una de las ventanillas traseras. Entre otras cosas, la mochila de André había desaparecido. “¡NO,NO,NO! Me advirtieron que era peligroso llevar dinero conmigo y lo dejé junto con mi pasaporte en la mochila”, clamó. “Antes que nada debe ir a la Delegación a denunciar”, indicaron en el teléfono del seguro. Sacudimos de mala manera los vidrios que cubrían el asiento y partimos hacia la oficina oficial donde nos aguardaba la impaciencia de horas esperando a que el Ministerio Público (que resultó un hombre con aspecto de delincuente) nos tomara la declaración. Entregué la identificación exigida y expliqué que la del señor había sido robada junto con su mochila. “¿Bebieron alcohol?”, inquirió la autoridad. “Si señor, pero esto no es el alcoholímetro, venimos a denunciar un robo”, repliqué. “¿Cuánto dinero dice usted que traía en la mochila?”, siguió. “Tres mil Euros, el pasaporte, el carnet de conducir”, fue mi traducción dado que André no habla español. Después del interrogatorio, el funcionario me ordenó: “Espere a que la llamen para una revisión médica”. “¿Quéee? ¡Oiga que le pasa! Yo vine a denunciar un robo, ¿por qué me van a revisar?”, solté sin pestañear.

Amargos y frustrados abandonamos la Delegación. “Llévame por favor a la Embajada Francesa para ver cómo me pueden ayudar”, pidió mi amigo, ya extraviado cualquier asomo de sonrisa. Después de un interrogatorio le entregaron un documento temporal de identidad. “Vive la France”, dijo André haciendo una reverencia en su Embajada. Aún faltaba resolver los problemas del dinero y el boleto de avión. Ante su desamparo se me ocurrió que lo menos que yo podía hacer era recibirlo en mi casa. “¿Quién es este güey?”, preguntó uno de mis hijos nada más verme llegar con mi amigo. Al día siguiente pagué el importe del vuelo que mi amigo emprendió sin antes conocer las Pirámides ni Xochimilco. Se fue repitiendo obsesivamente “Vive la France”, utilizó uno incluso a la hora de despedirse de mí. “Pero qué tipo más pesado”, pensé mientras buscaba en mi celular su número para eliminarlo.

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