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Declaración

Diálogo

YAMIL DARWICH

Andrea Karina Favela Favela, Kevin Omar de la Torre Cigala, Xitlalli Alejandra González Hernández, César Barajas Moreno, Joselín Uc Estrada y José Daniel Barrios Guerra, son alumnos de cuarto semestre de arquitectura de la UAL; ellos cursaron la materia "Cultura y Sociedad", de corte humanística y formación integral -en otras escuelas les llaman "de relleno" por tener currículas instructoras y no educadoras- en la que hubieron de declarar sus propósitos como futuros profesionistas laguneros.

Luego de dialogar y trabajar por equipos, escribieron en consenso una "Declaración de Compromiso para su Vida como Arquitectos y Ciudadanos Comprometidos con su Comunidad", después de analizar las realidades del presente, las alternativas de solución o mejora y los compromisos adquiridos por la reflexión, para ellos mismos con sus familias y toda la sociedad en la que habrán de influir al graduar.

Sin duda son un ejemplos de la juventud universitaria positiva; en ellos descansará el futuro de las nuevas generaciones de laguneros y por la trascendencia de lo escrito quiero compartirlo con ustedes, sabedor que será una refrescante esperanza y renovada confianza en las nuevas generaciones -todos menores a los 21 años- que lograrán lo que los viejos no logramos: llevarnos al buen cambio, hacia una vida comunitaria mejor:

DECLARACIÓN:

Desde que está presente el ser humano en la tierra, se ha visto obligado a relacionarse con el medio que lo rodea; gracias a esto y al paso del tiempo, se fueron creando culturas y con ello costumbres y un estilo vida diferente en cada región del planeta.

Enfocándonos en México, se sabe que nacimos de un "choque de culturas" creando con ello una mezcla del comportamiento social, como también el origen de una desigualdad, tanto económica como rural y urbana. Lo vemos, claramente en el diseño de ciudades donde a los extractos económicos bajos se les tiene lejos, en las periferias, en colonias con malos servicios y nulas oportunidades de salir adelante.

Hablando de los valores del ser humano, hemos caído en el conformismo de tener gobiernos que no responden al pueblo, ya que sólo buscan su crecimiento tanto de riquezas como de influencias. Esto ha creado un estado de caos en las instituciones del país, las cuales se han convertido en empresas "privadas" que sólo miran hacia los propios intereses de quienes están al mando de ellas, imposibilitando soluciones reales a los problemas del país.

Son muy pocos los países que cuentan con la riqueza cultural y natural de México, pero nos ha parado el crecimiento de la corrupción y la ineficacia de nuestras instituciones gubernamentales.

Nosotros, como arquitectos, en el ámbito constructivo y cultural, reincorporaremos los estilos arquitectónicos mexicanos y vernáculos de cada región del país, ya que ellos deben estar pensados en las necesidades climáticas, culturales y constructivas del país. Con esto crearemos una cultura y un respeto hacia las tendencias artísticas representativas de México.

Uniremos a personas a esta misma causa y con ello eliminaremos algunos cánones de belleza que han sido traídos a México, los cuales no son pensados para esta región del planeta.

Vivimos en una sociedad donde todos se preocupan por sí mismo, nada vale más que alimentar nuestra propio satisfacción; las personas que cuentan con el poder y el dinero para hacer un cambio necesario no lo hacen.

Nosotros, como arquitectos y sobre todo como personas, queremos cambiar la imagen que el mundo exterior tiene sobre México.

Nosotros construiremos casas que sean realmente dignas de llamarse "hogar", ya que las viviendas que ofrece el gobierno son un "gallinero" con un estela de corrupción detrás de ellas.

Queremos contribuir en el cambio rural, pero también queremos renovar la imagen que tenemos como cuidad, dándole vida a lo que antes estaba muerto, como supermercados que quebraron y se podrían utilizar esos espacio en centros recreativos, donde la gente pueda llegar a pasar un buen rato, con sus mascotas, con su familia, con ellos mismos y para realizar actividad física.

A las personas de un extracto económico bajo: construirles una vivienda digna, lejos de enfermedades que les acortan la vida, creándoles casas orgánicas y, así mismo, dándoles el conocimiento para conservarlas.

Las casas que diseñaremos estarán pensadas para que sean un patrimonio familiar, en las que puedan vivir cómodamente, quizá durante generaciones y les puedan ayudar a salir adelante.

Todo esto se puede lograr; nada es imposible.

Nosotros, como arquitectos, daremos todo y como ciudadanos otorgaremos nuestra solidaridad, nuestro trabajo en equipo y nuestra tolerancia a todas las comunidades del país".

En mis tiempos de estudiante se hablaba de universitarios socialmente comprometidos que luego se transformaban en empresarios enriquecidos, muchos ilícitamente; yo tengo fe en éstos.

Ellos, como muchos otros jóvenes, son muestra de la riqueza que tenemos en nuestras universidades, que debemos cuidar y apoyar. ¿Verdad señores politiqueros?

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