Obsoleto. Sistema ya está quebrado, dice el docente investigador Miguel Ángel Ordaz.
Las elecciones de Coahuila y el Estado de México pudieran ser el preludio de lo que sucederá en el proceso de 2018, año en el que se renovará la presidencia de la República, como consecuencia de un sistema político-electoral que ha demostrado su obsolescencia, considera el politólogo de la UA de C Miguel Ángel Ordaz.
"Lo que se está poniendo en evidencia es el futuro de un sistema caduco quebrado, agotado (….) esto que pasó me parece que es el preludio de lo que pudiéramos suponer pudiera suceder el año que viene".
En el caso del estado de Coahuila, Ordaz considera que los actores principales salen mal librados o calificados como lo son el árbitro electoral y el gobierno, mientras que la participación ciudadana es de los pocos aspectos que destaca como positivos en esta elección.
"Empezaremos por los mal calificados que serían en principio el árbitro, que me parece que más allá de las explicaciones que se han venido dando, ha generado un conflicto que está pasando a otros estadíos donde pudiéramos pensar que la confrontación está a la vuelta de la esquina".
"Otro actor importante es, desfortunadamente, el gobierno, en lo que se pudo apreciar a partir de información derivada de observadores electorales nos indica que hubo una movilización enorme y una disposición de recursos por parte del estado, traducido en gobierno, de personas y de recursos...".
Opinión
Ordaz da su versión.
⇒ Da calificación positiva a la sociedad.
⇒ Para que este escenario no se replique en 2018 llamó a la ciudadanía a involucrarse en todos los asuntos de la vida pública.