Kevin Durant (d) llegó esta temporada a los Warriors. (AP)
Tener una postemporada perfecta de 12 ganados “no importa” a Kevin Durant, si al concluir las finales de la Asociación Nacional de Baloncesto (NBA), Warriors de Golden State deja que Cavaliers de Cleveland se lleve el campeonato.
“Llegar a 16 victorias seguidas, eso no me importa”, enfatizó Durant, quien quiere coronar con el título la gran campaña de Warriors en temporada regular y en la postemporada, luego que en esta última etapa, el equipo ha logrado 12 victorias seguidas, cifra que ningún otro había registrado.
Warriors y Cavaliers se enfrentarán por tercera temporada consecutiva en la serie por el título, en tanto Durant y LeBron James lo harán por segunda vez en unas finales, luego que ya chocaron en 2012, cuando Heat de Miami, con James a la cabeza, se impuso 4-1 y el Thunder de Oklahoma City de Durant se quedó con las ganas de ponerse el anillo de campeón.
Desde aquella vez ya se dio una metamorfosis, Durant es más maduro, son cinco años de experiencia, de fortaleza física y mental, una progresión al servicio de Warriors, al que llegó a esta temporada, para sumarse a una pléyade encabezada por Stephen Curry.
Dijo que ambos se divierten “como dos chicos que saben cómo jugar”, para tener a Golden State con las más altas expectativas de ganar estas finales de la Asociación Nacional de Baloncesto (NBA).
Compartió que “hemos construido nuestra química desde el principio de año y ha crecido para ponerse mejor, y tenemos que ser grandes para ganar esta serie, y los dos sabemos cómo hacerlo”.
Si en varias ocasiones ha enfrentado a LeBron James, esta vez sabe cómo hacerlo, y aunque no dio detalles muy tácticos, comentó que lo desafiará y le va a hacer difícil su accionar, porque sabe que puede anotar en racimos de puntos, al igual que Kyrie Irving.
