Grande. El poeta mexicano Eduardo Lizalde llega a recibir el Premio Internacional Carlos Fuentes. (CORTESÍA)
El poeta mexicano Eduardo Lizalde recibió ayer el Premio Internacional Carlos Fuentes a la Creación Literaria en el Idioma Español 2016 en una ceremonia en la capital en la que se aplaudió su dedicación y la "inteligencia y pasión" de su obra.
El autor, en cuya obra destacan títulos como El tigre en la casa, recibió una estatuilla diseñada por el artista Vicente Rojo, y a continuación pronunció un discurso en el que se centró en las obras de Fuentes La región más transparente y Terra Nostra.
Fuentes tuvo desde joven una presencia "imprevisible y sorprendente", apuntó.
La región más transparente, su primera novela, fue una "doble revelación para los mexicanos; les mostró el rostro de una ciudad que, aunque era suya, no la conocían", aseveró Lizalde.
Desde ese momento, "el joven escritor no dejaría de asombrarlos, desconcertarlos e irritarlos".
Comentó que "Fuentes estaba consciente de que su audaz primera novela abría en su país las compuertas de un aire nuevo y una sensibilidad estética que se adelantaba a la era de una brillante secuela de obras también innovadoras y magníficas", como Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, o Rayuela, de Julio Cortázar.
Asimismo, se refirió a la obra Terra Nostra, un libro "monumental" que supuso un "ejercicio hercúleo y agotador".
Es una novela que, en realidad, constituye "un inmenso poema en prosa, de poderío verbal y belleza sin precedente en nuestra literatura", aunque muchos lo tildaron de "excesivo e ilegible", recordó Lizalde.
Tras esta novela "quedaban al autor más de 40 años de vida", en los que prosiguió su trabajo hasta el momento de su "inesperada y violenta desaparición" en 2012, cuando "lo sorprendió la muerte con la pluma en la mano y en condiciones de absoluta lucidez y energía".
Un reconocimiento justo
La secretaria de Cultura, María Cristina García Cepeda, aseguró que Lizalde es "el poeta vivo más importante de México y uno de los más notables de la lengua española". Su producción, que incluye poemarios, libros de cuentos, ensayos y novelas, refleja "la fascinación para la belleza y la lúcida mirada ante la crudeza del mundo".
Además, su poesía se caracteriza por un "verso único" que "resplandece con inteligencia y pasión", remarcó García Cepeda. En las ediciones anteriores, el Premio Carlos Fuentes recayó en manos del peruano Mario Vargas Llosa y el nicaragüense Sergio Ramírez. El jurado de la tercera edición estuvo integrado por Ramírez, el español Juan Luis Cebrián y los mexicanos Jaime Labastida, Roger Bartra y Vicente Quirarte.