Las barreras para el despliegue de infraestructura de telecomunicaciones son un impedimento significativo para el cierre de la brecha digital y la transformación productiva de América Latina. Como se señala en un estudio publicado recientemente por CAF y cet.la, los países de la región enfrentan, en esta materia, dificultades administrativas, obstáculos para construcción de obra civil, cargas económicas elevadas y retos derivados de condiciones geográficas y sociodemográficas.
México requiere encontrar soluciones al respecto; a pesar de los avances logrados en precios y calidad de servicios, todavía es uno de los países con mayor rezago en penetración de telefonía móvil y se encuentra por debajo del promedio latinoamericano en penetración de banda ancha móvil. En el Reporte global de tecnologías de la información 2016 el país ocupó el lugar 76 de un total de 139 y, entre las categorías en medición la referente a la infraestructura fue la segunda con mayor atraso, al ubicarse en la posición 84.
Desde hace algunos años se han revisado los factores que limitan los resultados en la materia. Como refieren el Centro de Estudios de Competitividad, el IFT y el ITAM, ya en 2012 la SCT apuntaba a "reducir la brecha de mercado" en materia de conectividad con el objetivo de mejorar las condiciones en la oferta de servicios. Ante esto, las autoridades mexicanas y el sector privado han trabajado conjuntamente para implementar alternativas que faciliten el despliegue de infraestructura.
El recién presentado programa de arrendamiento de inmuebles federales supone un importante avance al poner a disposición los 10 mil 500 inmuebles del Estado considerados en una primera etapa para la instalación de infraestructura, que facilitará que los operadores puedan mejorar y llevar servicios a más localidades. Este programa es el primero en un proyecto que busca promover la instalación de infraestructura de telecomunicaciones en todo el país y que será complementado con otras acciones como la revisión de procedimientos para el despliegue, la adquisición de derechos de vía y el uso de postes, torres y ductos de las empresas productivas del Estado.
Al respecto, los participantes en estas importantes actividades plantean desarrollar un reglamento modelo a nivel nacional y un código de buenas prácticas, que sean referente para gobiernos locales y permitan la homologación de trámites, y la reducción de costos y plazos. Además, se analizan acciones para el óptimo aprovechamiento de los derechos de vía, incluyendo aquellos que pudieran facilitar las autoridades, y la realización de un inventario nacional de la infraestructura que podría ser compartida por parte de CFE y Pemex, revisando la normatividad vigente para permitir el máximo aprovechamiento de ésta, bajo criterios de no discriminación homologados y claros.
Pese a los avances, todavía se requiere mucho trabajo y coordinación para la consolidación de los temas mencionados y la participación activa de la SCT en este tema es imprescindible. Con base en los antecedentes, se vislumbra que el nombramiento de Édgar Olvera Jiménez como nuevo subsecretario puede contribuir a apuntalar el trabajo que se ha desarrollado para el despliegue de infraestructura. Su perfil profesional, centrado en áreas de política pública y regulación, con énfasis en la perspectiva jurídica, muestra que en la SCT se reconoce la importancia de desarrollar y concretar propuestas que permitan cumplir con los objetivos de conectividad. Desde su responsabilidad previa en el interior de la SCT, Olvera ha tenido una participación directa en el diseño y la concertación de los proyectos para el despliegue de infraestructura en telecomunicaciones referidos con anterioridad, por lo que las expectativas sobre las acciones que podrían desarrollarse en el sector durante los próximos meses resultan positivas.
El mantenimiento del diálogo público-privado es crucial para alcanzar los resultados previstos en materia de conectividad y parece que las decisiones y actividades desarrolladas recientemente en la SCT van dirigidas a facilitar este objetivo. Por medio del trabajo coordinado, generando certeza en el sector y condiciones apropiadas para el desarrollo de inversiones, tenemos la confianza en que será posible avanzar en el acceso a los servicios de telecomunicaciones de los mexicanos que aún no están conectados.
Director ejecutivo de la Asociación Interamericana de Empresas de Telecomunicaciones (ASIET)
