Las declaraciones de Parolin tuvieron lugar tras el duro pronunciamiento que lanzó, la víspera, la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) luego de reunirse en asamblea extraordinaria. (ARCHIVO)
El secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, insistió en advertir que la solución verdadera para la “dramática” crisis política y social en Venezuela son las elecciones, permitirle al pueblo decidir sobre su futuro.
Entrevistado a la salida de un congreso en Roma, el cardenal reconoció que la sede de la Iglesia católica siempre espera que exista la posibilidad de recuperar el diálogo, porque esa alternativa significaría que la situación en el país “en cierto sentido, está mejor”.
“Por lo tanto, no podemos hacer otra cosa que expresar nuestra esperanza de que esto ocurra porque lo que está teniendo lugar es verdaderamente dramático y corre el riesgo de ser cada vez más dramático”, lamentó.
“Pero, ya dije y lo repito, que a este punto la solución verdadera es la de las elecciones: dar al pueblo la posibilidad de expresarse según lo que querrá, pero dar de nuevo la soberanía al pueblo y permitirle de determinar su presente y su futuro”, agregó.
Las declaraciones de Parolin tuvieron lugar tras el duro pronunciamiento que lanzó, la víspera, la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) luego de reunirse en asamblea extraordinaria.
Los obispos rechazaron la propuesta del gobierno del presidente Nicolás Maduro de convocar a una Asamblea para reformar la Constitución, lamentaron “un desconocimiento del orden constitucional” y calificaron a la iniciativa de Constituyente como “innecesaria” y “peligrosa para la democracia venezolana”.
Además, lamentaron la “tergiversación y manipulación que diversos actores” han hecho de las palabras del Papa Francisco, quien “sigue con preocupación la situación del pueblo venezolano ante los graves problemas que le aquejan”.
Pidieron atender los “dramáticos niveles de hambre” que sufre la población, la total escasez de medicinas y atribuyeron las muertes de ciudadanos a los abusos de autoridad en acciones represivas.
Acusaron a los saqueos de ser parte de la agudización de la violencia y deploraron la presencia de grupos paramilitares (comúnmente conocidos como “colectivos”), los cuales “han arreciado su acción violenta e ilegal”.
Por otra parte, reconocieron la necesidad de un diálogo, pero advirtieron que actualmente no existen “garantías seguras” para su realización y por eso, consideraron que la forma privilegiada e indispensable de concretar el ejercicio democrático “es el camino electoral”.
Desde hace semanas, el Vaticano se vio obligado a abandonar su involucramiento en las conversaciones entre el gobierno de Maduro y la oposición, por la negativa del gobierno a considerar algunas de las peticiones necesarias el avance del diálogo
