El acuerdo entre el gobierno y los rebeldes plantea el traslado de 30,000 personas a lo largo de 60 días. (ARCHIVO)
Los accidentados traslados de población que afectaban a miles de sirios se reanudaron el viernes, según una televisora estatal siria, tras varios días paralizados. Una enorme explosión contra uno de los convoyes mató la semana pasada a docenas de personas.
El acuerdo entre el gobierno y los rebeldes plantea el traslado de 30,000 personas a lo largo de 60 días.
La cadena Al-Ikhbariya informó de la llegada de autobuses con cientos de vecinos de Foua y Kfarya, dos pueblos progubernamentales asediados por rebeldes, a refugios temporales en un suburbio de Alepo controlado por el gobierno.
Amer Burhan, evacuado de la localidad rebelde de Zabadani, dijo que sus autobuses empezaban a moverse hacia la provincia de Idlib, en manos de la oposición.
Los evacuados pasaron varios días atrapados en un punto de intercambio mientras los negociadores discutían sobre la identidad de los prisioneros liberados dentro del acuerdo. Una explosión golpeó el sábado al primer grupo de evacuados, matando a unos 130, la mitad de ellos niños.
