Miguel Mery Ayup (izq) entrega un volante a un automovilista en la Diagonal Reforma y Juárez, mientras que Jorge Zermeño (der) Infante escucha a un conductor en el crucero de bulevar Independencia y calle 12.
Los candidatos a la alcaldía de Torreón, Jorge Zermeño y Miguel Mery, ocuparon ayer algunos cruceros, donde repartieron personalmente volantes a los ciudadanos y colocaron calcomanías en los vehículos.
Miguel Mery Ayup, candidato por la coalición que encabeza el PRI, estuvo en el crucero de Diagonal Reforma y Juárez, acompañado de decenas de simpatizantes.
Los automovilistas tuvieron la oportunidad de escuchar en voz del propio candidato, las propuestas de su plataforma política en materia de seguridad, además de informar sobre la propuesta de gobierno que plasmó en el libro La Nueva Vía, hacia un modelo de ciudad y que presentó el jueves en el Teatro Nazas.
Los priistas participaron con entusiasmo en el volanteo de su candidato, algunos acompañados de sus familias, vistiendo playeras verdes y banderas con los logotipos de los partidos que aglutinan la coalición. Cada vez que el semáforo marcaba el rojo, aprovechaban para distribuir los materiales de su aspirante o pegar la propaganda permitida en los vehículos.
Por su parte, Jorge Zermeño Infante, candidato de la Alianza Ciudadana por Coahuila, que encabeza el PAN, acudió al crucero de bulevar Independencia y calle 12, donde ya lo esperaban simpatizantes vestidos con playeras blancas y banderas del albiazul.
Debido a que recientemente se fracturó un pie, Zermeño vestía una bota ortopédica pero eso no le impidió caminar entre los automóviles y saludar a los conductores, a quienes les solicitó su voto el próximo 4 de junio, acompañado por el aspirante a diputado Marcelo Torres y el primer regidor de su planilla, Ignacio García.
Algunos automovilistas le comentaron que le recordaban de cuando fue alcalde hace varios años, a lo que Zermeño respondió que haría todo lo posible por cambiar Torreón para bien.
El candidato recibió muestras de apoyo de automovilistas que le reconocían y le saludaban, incluso hubo quienes le compartían lo que consideraban que se debe cambiar en la ciudad, mientras Zermeño les insistía en participar en la jornada electoral con su derecho ciudadano.