— Cicerón
La página de Internet del Partido Joven de Coahuila no ofrece grandes detalles pero sí lugar a interpretaciones y suspicacias. Dan un número telefónico donde se les puede llamar pero no tienen una cuenta de correo electrónico institucional. En vez de ello, ponen a nuestra disposición la dirección [email protected]. Sobra decir que cualquier persona puede abrir una cuenta de Hotmail sin mayor trámite.
Su página tampoco dice quienes son sus dirigentes -ese apartado se encuentra vacío- ni la forma de contactarlos. También, sin texto alguno, una sección llamada “Conócenos”. No pude encontrar la dirección de oficina -ni Google que todo lo sabe pudo arrojar dicho dato- así es que lo busqué en la página del Instituto Electoral de Coahuila. Ahí sí viene.
En tiempos donde las redes sociales son una herramienta indispensable para la comunicación política, es importante señalar que la presunta cuenta de Twitter del Partido Joven (@PartidoJovenCE) con 573 seguidores, permanece inactiva desde el 23 de noviembre del 2013.
Tampoco parecen tener un apartado oficial en la red social Facebook. Navegando por la red me encontré con la página “Partido Joven” con cerca de 900 “Me Gusta”, sin embargo, tal espacio se dedica a denostar a la figura del profesor Humberto Moreira. A menudo comparten publicaciones y notas periodísticas que cuestionan con severidad al ex gobernador de Coahuila, así que bajo esa premisa se trata de un centro de difusión de “Fake News”.
Lo que sí aparece en su página web, plagada de errores ortográficos y sin acentos, es la declaración de principios del Partido Joven. También están incluidos, con mejor redacción, sus estatutos.
Comienzan definiéndose de la siguiente forma: “Un partido diferente con una nueva ideología por imprimir su sello único, no siendo de derecha, izquierda, centro, un partido que fincamos nuestro proyecto (sic) ideológico, político, cultural y social como de definición social progresista”. ¿Entendiste algo, querido lector? Porque yo no.
Ha trascendido que dentro de su probable agenda legislativa, el Partido Joven propondrá reabrir todos los casinos del Estado de Coahuila. También pretenden modificar la ley que indica que los antros deberán cerrar sus puertas a la 1: 30 am de la mañana, permitir las peleas de gallos y los juegos de azar.
Ante tan cuestionable hoja de ruta que sólo será factible si obtienen mayoría en el Congreso Estatal -se antoja muy difícil- el Partido Joven argumenta que van por un “entretenimiento responsable”. Sobre la postulación de Humberto Moreira como candidato a diputado plurinominal, cosa que ha provocado mucho barullo en todo el país, los representantes de dicho partido aclararon que la polémica “los tiene sin cuidado”.
Frente a los dichos del presidente del CEN del PRI, Enrique Ochoa, en el sentido de que expulsarán a Moreira de sus filas por haber buscado la diputación desde otro partido, el representante del PJ ante el Instituto Electoral de Coahuila manifestó que esta no puede darse en automático.
“Se le olvida al Presidente (Ochoa) o a lo mejor no conoce sus propios estatutos, que el artículo 228 prevé que deben respetar una garantía que es básica en cualquier procedimiento, la garantía de audiencia”.
Si lo observamos desde la aritmética política y bajo una óptica pragmática, la inclusión de Moreira como candidato del Partido Joven les garantiza no perder el registro y, posiblemente, obtener un gran número de votos pues muchas personas, de manera quizá incomprensible, todavía quieren al profesor y lo recuerdan con cariño.
Viéndose desde un punto de vista ético, darle un cargo y abrirle la vía de regreso a Humberto Moreira representa una aberración.
La pregunta pertinente, encima de las páginas de Internet caseras que parecen estar hechas al vapor para cumplir el requisito, es si el Partido Joven es tan joven como dice ser o se trata, para variar, o de un satélite del PRI o de un juguete de cualquiera de los hermanos Moreira.
¿Podemos y debemos tomar en serio al Partido Joven de Coahuila o es, como tantas cosas en política, otra gran simulación, una burla con cargo al erario y a los ciudadanos?
Nos leemos en Twitter y nos vemos por Persicope, sin lugar a dudas: @patoloquasto
