Sufrió quemaduras de segundo grado
Hace dos meses, una catástrofe sacudió a la aerolínea EgyptAir, donde supuestamente el recalentamiento de la batería de un teléfono celular, ocasionó que estrellara en el mar mediterráneo donde fallecieron 66 personas.
Esta vez, afortunadamente no terminó en catástrofe, y no fue un "smartphone", si no unos auriculares de baterías los que causaron quemaduras en rostro y manos de una joven, cuya identidad aún no ha sido revelada.
Durante un vuelo de Pekín, China, a Australia, mientras dormía y escuchaba música, sintió un ardor insoportable en su rostro, al despertar vio los audífonos chispeantes en su cuello y de inmediato los lanzó al piso donde comenzaron a arder en llamas.
La tripulación rapidamente extinguió el fuego con agua, y el avión continuó su curso normal; los pasajeros tuvieron que soportar el olor a plástico quemado durante varias horas.
Aunque no se mencionó la marca del accesorio, la comisión de seguridad Australiana, aconsejó no portar artefactos de baterías en aviones, ni mucho menos teléfonos inteligentes con tendencia a sobrecalentarse.
DEBIDO A LAS FUERTES IMÁGENES, FUERON COLOCADAS EN EL SIGUIENTE ENLACE