REFRANERO DEL QUIJOTE
Al realizar el cura -su compadre- y el barbero, amigos ambos de don Quijote, el donoso escrutinio de la biblioteca de éste para mandar a la hoguera los libros cuya lectura le han hecho perder el juicio, el barbero da con el ejemplar de "El Cancionero de López Maldonado", del cual se hace el siguiente juicio:
"También el autor de ese libro -replicó el cura- es grande amigo mío, y sus versos en su boca admiran a quien los oye; y tal es la suavidad de la voz con que los canta, que encanta. Algo largo es en las églogas; pero nunca lo bueno fue mucho: guárdese con los escogidos".
Interpretado a contrario sensu, este proverbio nos dice que de lo bueno se da poco, no abunda.
J.A García Villa
@jagarciavilla