Todavía sin poder digerir lo que ofrecieron el pasado lunes las universidades de Clemson y Alabama, ahora nos disponemos para continuar deleitándonos con el espectáculo de la NFL este fin de semana donde ya no habrá ningún espacio para una equivocación y después de que como era de esperarse que los equipos que salieron como locales en los juegos de comodín continúan para llegar el próximo domingo 05 de febrero en Houston, ahora la contienda en la ronda divisional se pondrá al rojo vivo esperando que siga el show de esta representación única sobre el planeta.
Todo empezará el sábado a partir de las 16:00 horas en el Domo Georgia y aunque la defensa de los Halcones Marinos tal vez ya no intimiden como cuando obtuvieron el Súper Tazón XLVIII, es innegable que la unidad del coordinador Kris Richard, se mantiene como la materia prima del entrenador en jefe Pete Carroll y que ya en estas instancias, era tal vez lo que pensaba Dan Quinn y su equipo cuando abandonaron el CenturyLink Field de Seattle después de la penosa derrota ante la escuadra del estado de Washington porque había una idea de que ambos se encontrarían de nuevo.
Así que se contempla apropiado que uno de los mejores choques de la temporada regular, podría tener una secuela pero esta ocasión en la hierba de los Falcones por lo que ahora Atlanta se encuentra con la oportunidad de justificar de que no son los mismos que salieron del campo con la cabeza mirando el césped cuando cayeron 26-24 en la semana seis.
Después por la noche y tal vez el encuentro más disparejo, los Texanos estarán de visita en Foxboro y quizá ni aunque vayan los fanáticos de Houston con los brujos de Catemaco, ¿Existe alguna posibilidad de que el equipo de Bill O→ Brien permanezca con vida? Todo mundo hace suponer que los Patriotas, estarán disputando el campeonato de la AFC.
La guerra continúa el domingo al medio día cuando los Acereros viajen a Kansas City para enfrentarse a los Jefes en el partido más esperado en el estadio "Punta de Flecha" en más de dos décadas y es la oportunidad de oro para la afición de la escuadra de Andy Reid para mostrar que es el graderío más fuerte del mundo pero lo más extraño de este partido es que el último triunfo de Kansas en playoff jugando en casa, fue precisamente en contra de los Acereros el 8 de enero de 1994 con un gol de campo ganador de Nick Lowery y liderados por la leyenda Joe Montana y el no menos legendario Marcus Allen; si vimos a Ryan Shazier el domingo pasado en contra de los Delfines ¿No andaba anestesiado?
Y ya por la tarde en el palacio de Jerry Jones, los Vaqueros y Dak, tendrán su verdadera prueba de fuego cuando reciban a los Empacadores y la última vez que Dallas terminó 13-3, en la primera ronda no les fue bien ya que los Gigantes los tomaron por sorpresa poniendo fin a una temporada gloriosa pero quieren evitar esa reaparición pero como ese año, también tuvieron éxito contra su oponente ya que dominaron a Green Bay en octubre pasado en el mismo Lambeau Field.
