Malbéne, controvertido teólogo, es dado a la polémica. Se diría que gusta de suscitar el enojo de sus colegas, que no lo ven como a uno de los suyos y lo llaman a sus espaldas "Amicus diaboli", amigo del demonio.
Su comentario acerca de la declaración del Papa sobre la pena de muerte ilustra lo que arriba dije. Escribe Malbéne en su más reciente artículo:
"Al oponerse a la pena capital Francisco afirma, con razón, que ningún castigo es bueno si no contiene en sí el don de la esperanza. Desde ese punto de vista, y tomando en cuenta que la misericordia de Dios es infinitamente mayor que la de los humanos, resulta difícil aceptar la existencia del infierno, pues es un castigo que dura eternamente y niega toda esperanza al condenado, según lo expresó Dante: 'Lasciate ogni speranza voi ch'entrate'. Abandonad toda esperanza, vosotros que aquí entráis.". No abandonemos nosotros la esperanza en la misericordia del Señor...".
Los malquerientes de Malbéne lo acusan de interpretar las cosas a su conveniencia. Seguramente no admitirán esta interpretación suya de las palabras de Su Santidad.
¡Hasta mañana!...