'Estoy agradecida con Dios, son frascos de vida'

En marzo de este año, Aída Gutiérrez Jáuregui de 52 años de edad y habitante de la colonia Latinoamericana de Torreón, estuvo internada en Torreón con niveles de azúcar en la sangre de 800 mg/dl.

La mujer tiene quince años con diabetes tipo 2 con neuropatía diabética y en este mismo 2016, abandonó el tratamiento convencional para utilizar el aceite de cannabis y así poder controlar su enfermedad.

En los primeros meses del año, Aída, abuela de la niña Emili Zoé -la menor que hasta el año pasado, llegó a sufrir un gran número de convulsiones diarias y que hoy, utiliza el mismo medicamento para combatir su epilepsia- cuenta que tenía dolores de columna, de piernas, tenía dificultad para subir las escaleras y presentaba problemas con la visión.

"Saliendo de la hospitalización, me dice mi nuera, la mamá de Emili, mi nietecita, que ahí tenía el remedio, que qué buscaba, le empecé a agarrar tantito aceite y vi que me empecé a sentir muy bien, fui con los doctores en Torreón pero batallé, no me lo querían aceptar, el tratamiento como es de cannabis está muy satanizado, pero empezamos a estudiar y nos dimos cuenta que servía para muchas cosas, para cáncer, para diabetes", expresó la mujer.

Ante la negativa de los médicos de Torreón para prescribir la receta, Aída y algunos integrantes de su familia viajaron a la Ciudad de México. "Empezamos a buscar a un especialista, me llevé los estudios y me dijeron que sí, que era apta porque después de tomarlo me había sentido bien, lo había tomado bajo mi responsabilidad, de todos modos el mal ya lo tenía, hasta la fecha no me arrepiento, porque rejuvenecí, me siento muy bien, ya veo bien, no me duelen las piernas, mi piel la tenía quemada, pero ahora la siento muy diferente", explicó.

Recientemente, Aída, logró que la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) le aprobara importar aceite de cannabis para tratar su enfermedad.

Se trata del primer caso en el país en el que un médico prescribe y Cofepris aprueba el uso de cannabidiol en el tratamiento de una condición médica que no es epilepsia, como las neuropatías derivadas de la diabetes.

Por su parte, Dion Markgraaff, presidente de HempMeds México, empresa que fabrica el fármaco, afirmó que es un logro que más doctores se atrevan a prescribir tratamientos alternativos a base de cannabis.

"Estoy agradecida con Dios, son frascos de vida y de salud (el aceite), estoy agradecida con la empresa porque ¿quién te regala vida?, gracias a mi nieta es que pude dar con este tratamiento", dijo.

Será cada seis meses, que Aída estará viajando a la Ciudad de México para su chequeo médico.