Todas las propiedades fueron ligadas a compañías constituidas por Villarreal para la adquisición de bienes raíces y decomisadas a través de una serie de demandas de extinción de dominio presentadas por fiscales federales en San Antonio. (RENÉ ARELLANO)
El gobierno de Estados Unidos recaudó hasta ahora más de 30 millones de dólares por la subasta de ocho propiedades decomisadas al extesorero de Coahuila, Héctor Javier Villarreal, quien en septiembre de 2014 se declaró culpable en una corte federal de lavado de dinero.
Un juez federal dictaminó a principios de 2016 que el gobierno podría tomar el control de residencias y locales comerciales que fueron adquiridas por Villarreal en San Antonio y el Valle del Río Grande (sur de Texas) con presuntos préstamos fraudulentos gestionados sobre el crédito del estado de Coahuila.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos inició la venta de las propiedades en agosto pasado con la subasta de la plaza comercial “North Point Retail Center”, en el norte de San Antonio, por un total de seis millones 750 mil dólares.
A principios de esta semana, fueron subastados en Brownsville, un complejo de apartamentos y un lote adyacente por dos millones 680 mil dólares, además de un condominio en la Isla del Padre por 390 mil dólares.
Este jueves en San Antonio se vendió un edificio que alberga una farmacia CVS en el norte de la ciudad, por 8.8 millones de dólares, y el “Centurion Storage Center”, un edificio de bodegas de almacenaje, por 11 millones 450 mil dólares.
La dependencia federal también subastó este jueves en San Antonio una residencia por 690 mil dólares y un lote adjunto por 100 mil dólares.
Todas las propiedades fueron ligadas a compañías constituidas por Villarreal para la adquisición de bienes raíces y decomisadas a través de una serie de demandas de extinción de dominio presentadas por fiscales federales en San Antonio.
Las autoridades estadounidenses sostienen que todas las propiedades fueron adquiridas con dinero robado de las arcas del estado de Coahuila.
Villarreal será sentenciado en abril próximo tras haber admitido culpabilidad en dos cargos de conspiración para el lavado de dinero y un cargo de conspiración para transportar dinero robado.
