No hay tiempo para llorar, no hay tiempo para lamentarse, dijo el entrenador de Pumas, Francisco Palencia.
Francisco Palencia es el mismo cuando gana y cuando pierde. Su rostro no cambia de expresión, su voz no cambia de tono.
Aunque sus Pumas hayan entrado a los tiempos de crisis.
“Se nos juntó —reconoce el técnico del Universidad Nacional—. Pero somos fuertes, los jugadores, la afición y el cuerpo técnico. Esto no nos va a detener”.
No le echó la culpa al silbante de la derrota, aunque sí señaló que la expulsión de Marcelo Alatorre, “nos condicionó. Jugar ante Tigres y con uno menos, es algo duro, pero mostramos mucha personalidad y tuvimos nuestras oportunidades. Vamos a salir de esto”.
El error cometido por Alatorre, “nos costó mucho lo que hizo el muchacho, no competimos en igualdad de circunstancias, pero aquí ganamos todos y perdemos todos. Se equivocó como muchas veces nos equivocamos al marcar o al tratar de anotar, no pasa nada”, justificó el estratega.
No hay tiempo para llorar, no hay tiempo para lamentarse. “Ya pensamos en Veracruz —rival del próximo viernes— y no interesa que sea de visitante, hay que ganar los juegos que nos quedan”.