Hace algunas columnas escribí sobre lo conveniente que sería que el gran choque entre los Patriotas de Nueva Inglaterra y los Acereros de Pittsburgh se jugará con las estrellas de ambos lados sanas y salvas, pues no, otra vez el destino perjudica severamente a mis Steelers, se podría lesionar el que tú quieras, pero nunca Big Ben. Roethlisberger sufrió una ruptura de meniscos en su rodilla izquierda que requirió una cirugía artroscópica, al salir del quirófano todo era sonrisas, una operación exitosa que prácticamente aseguraba que el número siete estaría de vuelta para la semana nueve, es decir, sólo se perdería el juego contra los Pats, ya que Pittsburgh descansa en la semana ocho. Pues no, resulta que se encontraron daños en la misma rodilla causados por la operación del 2015 que hizo que Big Ben se perdiera cuatro juegos y ahora el pronóstico se eleva a entre cuatro o seis semanas, dependiendo obvio de la evolución. Por lo pronto Roethlisberger se perdería los duelos contra Patriotas, Cuervos, Vaqueros y Browns, tentativamente reaparecería en Thanks Giving Day dentro de la triple jornada jugando en horario estelar en Indianápolis.
Hoy a las 2:25 de la tarde los Acereros intentarán competir de igual a igual contra los Patriotas con su Mariscal de Campo suplente Landry Jones, según los expertos uno de los peores Quarterbak suplentes de la Liga, en 2015 supliendo a Big Ben y a Michael Vick, Jones participó en siete juegos completando 32 de 55 para un 58.2 % para tres touchdowns y cuatro intercepciones. El 18 de octubre Landry jugó su primer partido en la NFL supliendo al lesionado Michael Vick que a su vez entró en lugar del lesionado Roethlisberger, Jones guió a los Steelers a una remontada de 10-6 para terminar ganándole a los Cardenales 25-13. Pero sobre todo, el juego más llamativo para él fue el de comodines contra los Bengalíes donde entró por Big Ben, mientras se recuperaba, Landry hizo lo que pudo completando dos de cinco pases para once yardas y una intercepción, Ben regresó al partido y los Steelers eliminaron a unos idiotas Bengals que se aplicaron el harakiri.
La situación hoy en Heinz Field luce totalmente en contra de Pittsburgh, revisando los pronósticos de los principales expertos a lo largo y a lo ancho de los Estados Unidos la gran mayoría coincide, con Ben Roethlisberger los Steelers eran marcados favoritos ligeramente, ahora el asunto dio un giro de 180 grados y prácticamente nadie da un cacahuate por mis Steelers, aunado a las dos desconcertantes derrotas ante Eagles y sobre todo contra los Delfines.
Por otro lado, Antonio Brown el mejor receptor de la NFL le ha hecho una promesa a Landry, "siempre estaré abierto", pero Brown estará custodiado por Malcolm Butler un esquinero excepcional, aun así la temporada pasada AB completó once pases para 113 yardas con la cobertura de Butler. Lo mejor será tratar de pasar lo menos posible, obvio tendrán que llegar circunstancias del juego que te obliguen a pasar y ahí sufrirá la Nación Acerera. El coach Tomlin tendrá que regresar a las bases que hicieron el más grande a los Steelers, el ataque terrestre, con Le'Veon Bell y el veterano, pero aún útil DeAngelo Williams, ése es el plan, pero lógicamente Brady y compañía atacarán con todo la defensa de Acereros, la ofensiva de Nueva Inglaterra es una pesadilla, Desde que regresó de su suspensión Brady se deshace del balón en 2.3 segundos y encuentra blancos ideales regados por todo el campo, corredores, receptores y alas cerradas son sus múltiples objetivos y por tierra el exacerero LeGarrette Blount corre para 439 yardas con seis touchdowns.
Los seguidores de Steelers estamos siempre con nuestro equipo, así nos han educado a los largo de los años y hoy no será la excepción, aplaudiremos cada yarda ganada y sufriremos cuando los Pats se acerquen a la Red Zone, así es esto y así siempre será, no se disfruta un triunfo sin sufrirlo.
