López Guillén fue visto por última vez con vida el lunes en la Casa Parroquial, donde estuvo conviviendo con otras personas. (ESPECIAL)
El párroco de Janamuato, Michoacán, José Alfredo López Guillén, reportado como secuestrado el pasado lunes, fue localizado muerto en un paraje sobre la carretera Puruándiro-Zináparo.
Este es el tercer sacerdote asesinado en menos de una semana, luego de que en Poza Rica, Veracruz, fueran secuestrados y victimados los presbíteros Alejo Nabor Jiménez Juárez y José Alfredo Juárez de la Cruz, hallados el pasado lunes 19.
La Procuraduría General de Justicia del Estado informó que el sacerdote presentaba impactos de bala en el estómago y estaba envuelto en una cobija. Con los resultados de la necropsia se pudo determinar que el cuerpo tenía una rigidez cadavérica de aproximadamente 120 horas, es decir, de 5 días.
López Guillén fue visto por última vez con vida el lunes en la Casa Parroquial, donde estuvo conviviendo con otras personas. Según el cardenal Alberto Suárez Inda, el religioso fue sacado a la fuerza por desconocidos, quienes se llevaron también algunos objetos de valor y el vehículo de la víctima.
La unidad fue localizada al día siguiente, volcada a 90 kilómetros de Janamuato, Municipio de Puruándiro, en la desviación a la localidad de Santa Fe de la Laguna. El caso dio un giro cuando fue divulgado un video que presuntamente mostraba al religioso acompañado de un menor en un hotel de Puruándiro.
