En La Laguna opera un programa federal y uno municipal para impulsar la creación de un negocio propio
El Siglo de Torreón
COMARCA LAGUNERA.- Distintos proyectos, pero con un mismo resultado ha tenido la operación del microcrédito en La Laguna: apoyar el crecimiento de los negocios establecidos. A partir de junio de 2004, se estrenó en la región la primer microfinanciera que otorga líneas de financiamiento a los pequeños empresarios y amas de casa, los cuales tienen el interés de impulsar un negocio propio.
Las opciones en La Laguna se concentran en el programa federal de microcrédito que promueve la Secretaría de Economía, el cual otorga apoyos desde mil pesos hasta 30 mil, así como a través de un Fideicomiso del Municipio de Torreón. Los apoyos son menores, desde mil 500 hasta diez mil pesos, pero con la facilidad de no entregar garantías y con la obligación de ahorrar en grupo.
El primer caso es la Unión de Crédito de Gómez Palacio. Hasta el momento es la única institución auxiliar de crédito con presencia física en la Comarca Lagunera que opera una microfinanciera, pero que bien podrían multiplicar su servicio con la apertura de una nueva sucursal en La Laguna de Coahuila.
Por el momento, la lista de solicitudes de financiamiento es larga, sin embargo, sólo aquellos que han demostrado tener experiencia en la actividad a desarrollarse han tenido mayores posibilidades de obtener un préstamo. Los montos a prestar van desde los mil pesos hasta los 30 mil, crédito que podrá ser pagado en un plazo de hasta seis meses o un año de acuerdo al dinero entregado, aplicando una tasa de interés desde un 2.5 hasta un cinco por ciento mensual. Para respaldar el préstamo, el solicitante debe ofrecer una garantía prendaria.
Los giros que se han apoyado abarcan desde una miscelánea, salón de belleza, venta de ropa y calzado, laboratorio de análisis clínicos y pequeños talleres de torno, entre otros.
De acuerdo a Gabriela Dovalina, gerente de la Unión de Crédito de Gómez Palacio, la respuesta ha sido muy positiva en estos seis meses de operación, particularmente en el área suburbana de la Comarca Lagunera la demanda de créditos pequeños se ha multiplicado, motivo por el cual se contempla abrir una sucursal en Torreón para atender el gran número de solicitudes que se han presentado por amas de casa o pequeños empresarios.
Casos concretos
La lista es muy amplia de casos en donde la microfinanciera ha apoyado para impulsar un proyecto productivo en la Comarca Lagunera.
Uno de estos ejemplos es María Guerrero Carrillo, propietaria de la estética Coquis. Ella es una de las muchas microempresarias que han solicitado un financiamiento a la microfinanciera de la Unión de Crédito Industrial de Gómez Palacio, logrando a la fecha la segunda autorización.
Con una experiencia de más de 20 años como estilista profesional, María Guerrero pidió un préstamo en marzo de 2004 gracias a las recomendaciones de una amiga. Por ser una distribuidora de tintes, polvos y colorantes, demanda capital de manera revolvente para surtir de productos a otros salones de belleza de Gómez Palacio.
La primera autorización fue de cinco mil pesos, el cual se pagó en 16 semanas –cuatro meses-, a una tasa de interés del cinco por ciento mensual. Después de concluir con el compromiso contraído, en noviembre del presente año nuevamente logró un segundo financiamiento por siete mil pesos, el cual deberá cubrirse en 20 semanas, con un rédito de cuatro por ciento mensual.
La entrevistada invierte el dinero del préstamo en la compra de material y de muebles para renovar la estética que tiene a su cargo, por lo que considera que la creación de las microfinancieras es una alternativa viable para quienes demandan pequeños préstamos y con bajos intereses.
Al igual que otros pequeños empresarios, María Guerrero ha tocado muchas puertas, en donde ha tenido que pagar hasta una diez por ciento de interés mensual, por lo que considera que es mucho más confiable la estructura de una microfinanciera a un banco o prestamistas.
Destaca que realizar los pagos semanales le genera una mayor responsabilidad y confianza ante la institución que confió en ella para otorgarle una línea de financiamiento, por lo que afirma “me gusta ir a pagar cada ocho días”.
La entrevistada considera que debería operar un mayor número de microfinancieras en La Laguna, particularmente en la parte de Torreón, ya que sus hermanas y amigas han tenido malas experiencias con entidades financieras como Financiera Independencia o prestamistas, por lo que buscan una mejor opción para obtener recursos a un bajo costo.
Por el momento María Guerrero Carrillo ya ha realizado la recomendación de boca en boca a sus amigas, quienes se dedican a la venta de artículos para el hogar, ropa y calzado.
Laboratorio especializado
La experiencia de Rosalío Moreno Corral, propietario de laboratorio de análisis clínicos Cristal, es muy distinta a las demás. Comenta que no es la primera vez que presenta una solicitud de financiamiento ante una institución financiera, sin embargo, en aquella ocasión no tuvo suerte y no obtuvo la autorización.
Relata que gracias a que leyó una publicidad sobre la microfinanciera cuando visitaba un cliente, consideró que era más viable si autorizaban un crédito por un monto pequeño a uno grande.
El entrevistado señala que el trámite se llevó a cabo de manera rápida. En septiembre de 2004 hizo la solicitud y en escasos 15 días, la línea fue aprobada. El préstamo asciende a 30 mil pesos, el cual se pagará a un año, a una tasa de tres por ciento anual.
“Me interesó por lo rápido de la aprobación de la línea de crédito”. Sin embargo, para cubrir los trámites correspondientes fue necesario dejar una garantía prendaria, en una proporción de tres a uno. En su caso, Rosalío Moreno dejó la factura de un equipo que vale mucho más que el monto prestado, por lo que consideró que no tendrá dificultades para pagar en tiempo y forma. El dinero que obtuvo de la microfinanciera lo aplicará para surtir reactivos para laboratorio, por lo que cita que debido a las características de su negocio requiere constantemente capital revolvente para la compra de materiales.
Con 11 años de experiencia dentro de los análisis clínicos y sólo tres en estudios especializados, el entrevistado señala que el microcrédito es una buena opción para los pequeños empresarios, ya que los bancos no prestan. Indica que en la medida que se pida un mayor monto, los requisitos y el tiempo de espera son mayores, por lo que muchos micro y pequeños negocios no pueden esperar sentados para obtener la aprobación.
Al igual que otros, Rosalío Moreno está a la espera de concluir su pago y solicitar un nuevo financiamiento, pero por un mayor monto.
De boca en boca
Martha Cortés Favila, propietaria de la Miscelánea “El Buky”, ubicada en Gómez Palacio, conoció la microfinanciera gracias a una amiga. Desde hace cuatro meses, logró la autorización de un préstamo por diez mil pesos, dinero que lo pagará en seis meses a una tasa de interés mensual de cuatro por ciento.
Relata la entrevistada que en cuatro días se realizó el estudio y aprobación de la línea de crédito. Para ello fue necesario entregar una garantía prendaria de un vehículo, por lo que fue posible obtener el dinero para surtir de abarrotes su pequeño negocio.
Con dos años de experiencia en la venta al menudeo al público, Martha Cortés explica que es la primera ocasión que acude a solicitar un financiamiento, por lo que su experiencia como usuaria del sistema crediticio hoy es buena. “Es muy difícil agarrar el dinero junto y no en partes”.
A la espera de terminar de pagar el próximo 15 de febrero de 2005, la pequeña comerciante espera poder renovar su crédito con la microfinanciera por el mismo monto. Comenta que es la cantidad adecuada, que se ajusta a sus necesidades y posibilidades de pago.
Martha Cortés como muchas otras mujeres labora en su propia casa, cumpliendo ella una jornada de ocho horas para atender su tienda y generar los ingresos necesarios para hacer frente a sus compromisos.
Un ahorro permanente
María del Carmen Rodríguez Rodríguez, directora del Fideicomiso del Programa Permanente de Ahorro y Microcrédito informó que los recursos otorgados en 2004, crecieron en más de un 65 por ciento anual. En 2003, los núcleos solidarios apoyados por el Ayuntamiento de Torreón demandaron créditos por 9.2 millones de pesos, monto que fue superado en 2004, con préstamos por 14.070 millones de pesos.
El esquema es una copia de un programa impulsado en Guanajuato para impulsar las microempresas, por lo que en la administración de Jorge Zermeño Infante se viene aplicando hasta la fecha. La propuesta es crear núcleos solidarios en grupos de mujeres o personas con necesidad de impulsar un negocio propio, por lo que al inicio se pide un determinado monto de ahorro y en base a dicha cantidad se otorga el primer préstamo de mil 500 pesos, hasta complementar siete ciclos por un monto de ocho mil 500 pesos.
La entrevistada comenta que el crecimiento en la colocación de recursos se debe no a un aumento en capital, sino a la apertura de nuevos grupos y a que un gran número de ellos se encuentra en el ciclo segundo y tercero, los cuales demandan mayores recursos.
El programa está diseñado preferentemente para las mujeres amas de casa, sin embargo, existen casos en donde se suman hombres a los núcleos solidarios y ahorran en conjunto para sostener la línea de financiamiento abierta. Debido a que se trabaja en equipo, el compromiso de pagar en tiempo y forma compromete al grupo a estar al corriente de sus pagos, por lo que los índices de cartera vencida son bajos, calificando como sana la cartera que se adeuda.
Hasta el momento los negocios que se han impulsado son muy diversos y van desde una fábrica de hierro forjado, máquina de medias y de cerámica, elaboración de pasteles y ventas de catálogo, entre otras.
Durante 2004, el Programa Permanente de Ahorro y Microcrédito premió a quienes cumplieron en tiempo con sus obligaciones, otorgándoles un octavo ciclo de préstamo por diez mil pesos.
Por el momento, el presupuesto asignado en 2005 aún no se concreta, por lo que María del Carmen Rodríguez comenta que se ha solicitado al Fideicomiso información sobre la operativa para obtener resultados positivos en la cobranza.
Definiciones
A continuación se presentan algunas definiciones acerca de lo que es un microcrédito y hacia que nicho de mercado esta dirigido el apoyo.
*Son organizaciones e instituciones, que brindan servicios financieros (ahorro y crédito) a los más pobres.
*Ofrecen servicios financieros sólo a sus clientes, a través de pequeñas cuentas de ahorro, individuales o grupales, y créditos que van de acuerdo a sus necesidades y a su situación económica.
*Las personas más pobres y vulnerables y que solicitan participar en el programa de una institución de microcrédito.
*Las microfinancieras tienen diferentes requisitos y distintas formas de articipación, porque se adaptan a las necesidades de la comunidad a la cual le ofrecen el servicio financiero.
*Las microfinancieras no prestan grandes cantidades, tienen metodologías muy
específicas para colaborar con sus clientes e ir incrementando las sumas de prestamos para evitar el endeudamiento desmedido y la incapacidad de pago. Por lo general, inician con pequeñas cantidades de crédito y en algunas también de ahorro, que se incrementan gradualmente hasta lograr establecer un
historial crediticio exitoso.
*Los servicios que ofrecen son préstamos (crédito) por cantidades pequeñas, que se incrementan de acuerdo a los plazos de pago fijos. Los montos crecen escalonadamente de acuerdo al cumplimiento de pago en cantidad y tiempo. La capacitación se brinda para aprender cómo se maneja el crédito y se fomenta el ahorro para formar un patrimonio individual y/o familiar.
*El Presidente Vicente Fox Quesada, interesado en apoyar las capacidades
productivas de los más pobres para mejorar sus condiciones de vida, ha establecido en la Secretaría de Economía el Programa Nacional de Financiamiento.
al Microempresario (Pronafim).
