El dominicano David Ortiz se retirará al final de la temporada. (AP)
Los Medias Rojas de Boston no consideraron que la imagen reflejada en los muñecos de promoción con la figura de David Ortiz reflejaban su mejor imagen y decidieron cancelar la entrega gratuita que tenían programada para los primeros 15.000 aficionados que llegasen al partido de ayer ante los Yanquis de Nueva York.
Los aficionados de los Medias Rojas que fueron al ver el partido al Fenway Park se encontraron sin los prometidos muñecos cabezones de Ortiz.
El equipo había prometido regular muñecos cabezones de Ortiz a los aficionados, pero el presidente de los Medias Rojas, Sam Kennedy, dijo que eligió posponer la promoción luego de hacer un control de calidad del producto.
"Pensé que los muñecos cabezones presentaban un retrato inadecuado de David", comentó Kennedy. "Para ir más allá, pensé que los rasgos faciales mostraban algún tipo de insensibilidad de tipo racial".
Los muñecos cabezones fueron hechos por la compañía de promociones BDA Inc., que hasta ahora no ha dado a conocer ningún comunicado sobre lo sucedido con el producto que le fue encargado.
Kennedy señaló que el equipo regalará un nuevo muñeco de Ortiz en una fecha futura a cualquiera que tenga guardado el boleto del partido de ayer.
Los muñecos eran esperados con anticipación porque Ortiz se retirará luego que concluya la presente temporada.
Este no es el primer problema relacionado con muñecos como estos.
El año pasado, los Nacionales de Washington tampoco entregaron un muñeco de Jayson Werth en el que la boca del jardinero estaba bien abierta.
Cinco meses más tarde, el equipo regaló un muñeco de reemplazo a los fanáticos que tenían guardada la contraseña del partido original.
En 2006, los Orioles de Baltimore cancelaron la entrega de un muñeco de Brian Roberts luego que su cara aparecía demasiado oscura.
Uno de los problemas más extraños relacionados con la entrega de muñecos como estos ocurrió en agosto de 2012, cuando los Filis de Filadelfia regaló 45.000 muñecos de Hunter Pence a sus fanáticos justo después de haberlo cambiado a los Gigantes de San Francisco.
