Alejandra Valencia buscará su primera medalla en Olímpicos. Alejandra Valencia va por sus segundos Juegos
Cuando Alejandra Valencia toca el violín, nada puede perturbarla. Y es que, la paz que siente al momento de escuchar una melodía, le recuerda la serenidad que experimenta segundos antes de disparar una flecha.
La arquera, quien debuta el viernes en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, comparte las emociones previas a su segunda participación en una justa veraniega.
"Cuando coloco el violín en mi hombro vivo una sensación parecida a la que siento en las competencias, porque debes estar muy concentrada. Es un momento que tienes contigo misma, porque no escuchas nada más del exterior y te relajas. Cuando no logro un tono es como no alcanzar el 10 con mi flecha", explica.
Es en 2011 cuando Valencia comienza a conocer el violín de manera autodidacta; desde entonces pasa hasta dos horas y media y cinco días de la semana practicando.
Lo hace sola. En el campo de entrenamiento del COM o en su cuarto de la villa de los deportistas. En contadas ocasiones toca algún tema en reuniones familiares, aunque confiesa que a veces forma duetos o tríos con sus familiares que también tocan instrumentos como la guitarra y la armónica.
"Es para llenar mi medidor de energía, ojalá algún día pudiera ser como [Niccolò] Paganini, pero creo que lo hago mejor en el tiro con arco", comparte. Ale siempre carga una libreta a sus entrenamientos y competencias. En ella escribe todas las ideas que pasan por su mente.