Las acciones de Nintendo han caído casi un 21 por ciento en la Bolsa de Tokio en las últimas tres jornadas. (ARCHIVO)
El gigante japonés de los videojuegos Nintendo registró entre abril y junio, primer trimestre del año fiscal japonés, una pérdida neta de 24.534 millones de yenes (unos 232 millones de dólares) por los efectos de la apreciación del yen.
El dato contrasta con los 8.234 millones yenes (unos 77 millones de dólares) de beneficio neto que obtuvo en el mismo periodo del año anterior.
La empresa ha mantenido intacta su previsión de beneficios para todo el ejercicio fiscal, por lo que de momento estima que el impacto financiero que tendrá en su balance el juego para teléfonos inteligentes "Pokémon Go", del que es codesarrolladora, será limitado, tal y como apuntó en un comunicado la semana pasada.
Las acciones de Nintendo, que llegó a duplicar su valor bursátil tras el lanzamiento del juego el pasado 6 de julio, han caído casi un 21 por ciento en la Bolsa de Tokio en las últimas tres jornadas.
La empresa espera cosechar para todo el ejercicio un beneficio neto de 35,000 millones de yenes (331 millones de dólares), lo que supondría un 112 por ciento interanual más.
Su beneficio operativo para todo el año quedaría en 45,000 millones de yenes (más de 425 millones de dólares), un 36.9 por ciento más, apoyado en una facturación por valor de 500,000 millones de yenes (4,735 millones de dólares), un 0.9 por ciento más.
Entre abril y junio de este año, Nintendo registró una pérdida en concepto de explotación de 38,674 millones de yenes (366 millones de dólares), en contraste con la ganancia de abril-junio del año pasado por valor de 14,286 millones de yenes (135 millones de dólares).
También cosechó una pérdida operativa por valor de 5,134 millones de yenes (48 millones de dólares), frente al beneficio de 1,149 millones de yenes (10.8 millones de dólares) que obtuvo en el mismo periodo de 2015.
Y es que el valor de sus ventas cayó un 31.3 por ciento interanual, hasta los 61,969 millones de yenes (587 millones de dólares), afectadas especialmente por la apreciación que ha sufrido el yen.
