'Indignada con el ataque de hoy en Kabul que mató a decenas de personas que se manifestaban pacíficamente. Estamos con el pueblo afgano contra el terror', dijo hoy en su cuenta de la red social Twitter. (ARCHIVO)
La virtual candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, dijo sentirse "indignada" por el ataque suicida ocurrido en Kabul que provocó la muerte de al menos 80 personas y más de 231 heridos en una manifestación de la minoría étnica hazara, de la rama islámica chií.
"Indignada con el ataque de hoy en Kabul que mató a decenas de personas que se manifestaban pacíficamente. Estamos con el pueblo afgano contra el terror", dijo hoy en su cuenta de la red social Twitter Clinton, secretaria de Estado entre 2009 y 2013.
El Gobierno de EEUU también condenó hoy el ataque en Kabul, primero con un comunicado de su embajada en Afganistán, luego mediante una nota del portavoz de la diplomacia estadounidense, John Kirby, y también a través del portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
"Estados Unidos condena en los términos más enérgicos el horroroso ataque de hoy en Kabul, Afganistán", destacó el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
En su comunicado, el portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, fue más allá y ofreció la ayuda de Estados Unidos al presidente afgano, Ashraf Ghani.
"Enviamos nuestras más profundas condolencias a los seres queridos de los fallecidos y heridos, y ofrecemos al presidente Ghani toda la ayuda que pueda necesitar mientras su Gobierno investiga y trabaja para llevar a los asesinos ante la justicia", subrayó Kirby, quien calificó el ataque como "despiadado".
El Estado Islámico (EI), a través de la agencia de noticias Amaq vinculada al grupo yihadista, se ha responsabilizado del ataque después de que los talibanes negaran cualquier implicación en el atentado.
"Dos combatientes del EI detonaron cinturones con explosivos en una concentración de chiíes en la zona de Dehmazang en Kabul", según un escueto mensaje difundido Amaq.
El ataque se produjo hacia las 14.30 hora local (10.00 GMT) durante una manifestación de miles de afganos, la mayoría hazaras, que protestaba contra un proyecto eléctrico del Gobierno y discurría pacíficamente entre fuertes medidas de seguridad, que impidieron que la marcha se acercara al palacio presidencial.
