La reventa de boletos se da de manera disfrazada. (Especial)
Para despistar y evitar multas de hasta 15 mil dólares por revender boletos de los últimos juegos de la Eurocopa, los revendedores camuflaron con mensajes falsos o juegos de palabras la venta de los tickets en internet.
Con mensajes como "se venden cuatro dvd Francia-Alemania", por más de dos mil dólares, o "Album Panini" de estampillas de jugadores, por ese mismo precio, los revendedores llenaron de anuncios rocambolescos los sitios web de venta entre particulares en Francia, que las web borran, pero que reaparecen en cuestión de minutos.
La mayor explosión de la reventa, prohibida por la Confederación Europea de Futbol (UEFA) y castigada con multas de más de 15 mil dólares para un vendedor y de una condena de "complicidad" para el comprador, surgió sobre todo por la semifinal entre Alemania-Francia de ayer en Marsella.
El juego despertó de repente un enorme interés por el futbol en Francia, el país anfitrión, y los boletos se cotizaron entre algo más de 300 dólares y los dos mil dólares para asistir a la semifinal del torneo, que se jugó ayer en el Estadio Velodrome del puerto mediterráneo.
La mayoría de la reventa se realiza a través de internet, ya que los revendedores consideran muy arriesgado vender en las cercanías de los estadios debido al fuerte dispositivo de seguridad implantado para el torneo por la amenaza terrorista que pesa sobre el país.
No obstante, algunos revendedores se atreven muy discretamente a ofrecer boletos en las inmediaciones de los estadios, antes del primer perímetro de seguridad, que para superarlo se necesita portar un boleto o un gafete.
En un intento por combatir el fenómeno, la UEFA emitió los boletos nominativos durante las sucesivas ventas en internet, pero los agentes de seguridad, policías y gendarmes no piden en la mayoría de los casos ninguna identificación a los espectadores, que deben llegar a los estadios con horas de antelación.
El riesgo de un control tampoco representa un problema para los revendedores. Para calmar a sus potenciales compradores algunos de ellos ofrecen prestarles incluso una identificación suya para superar un eventual control de identidad.
