“Doctor, déjeme morir”, es la frase que resonó tanto en los oídos de quienes lo atienden como entre quien sigue su estado, y con las que Rodríguez expresa su sentir sobre su condición. (ARCHIVO)
El torero mexicano Rodolfo Rodríguez "El Pana", tetrapléjico por la embestida de un toro desde el pasado 1 de mayo, en Ciudad Lerdo, Durango, continúa en terapia intensiva tras presentar afecciones pulmonares y cardíacas; no obstante, ha logrado comunicarse para expresar su voluntad sobre el tratamiento que se le aplica.
“Doctor, déjeme morir”, es la frase que resonó tanto en los oídos de quienes lo atienden como entre quien sigue su estado, y con las que Rodríguez expresa su sentir sobre su condición.
"Actuaremos con criterio ético y no iremos más allá de lo necesario”, explicó ante esta situación el doctor Francisco Martín Preciado, director del Hospital Civil de Guadalajara al diario El País.
“Es muy posible que sobrevengan situaciones que se ajusten a su voluntad. Ahora mismo, su esperanza de vida se mide por turnos”, agregó el médico.
LAMENTABLE CASO
"El Pana", de 64 años, fue embestido por su segundo toro llamado "Pan Francés", y lanzado por los aires en una corrida celebrada el pasado 1º de mayo en Lerdo, estado de Durango, y al caer de bruces sufrió unas fracturas que le dejaron tetrapléjico.
Apenas el lunes, el torero presentó un descontrol cardiovascular y hace una semana sufrió un paro cardíaco pero los médicos lograron estabilizarlo aunque su vida sigue en peligro.
Los médicos mantienen a "El Pana" conectado a un respirador artificial y a petición de sus familiares los médicos tenían contemplado cambiarlo ayer a piso, pero se canceló, debido a que Rodríguez presentó fiebre.
