Desinterés. Don Jorge (de blanco con bastón) es vecino de Quintas San Isidro III de Lerdo.
El profesor jubilado, Jorge Ambrosio Félix, de 62 años de edad, trabajó durante 33 años de su vida y esperaba contar con una casa propia para su vejez, sueño que se vio truncado. Ahora está a punto de terminar de pagar su crédito hipotecario, pero no es dueño de nada debido al fraude del que fue víctima al igual que otras 80 personas -en su mayoría maestros jubilados- del fraccionamiento Quintas San Isidro III, construido por la empresa Graciano y Asociados, que desapareció sin municipalizar dicho fraccionamiento.
"Somos personas que de buena fe estuvimos comprando casas a Graciano y Asociados, desgraciadamente la empresa nos hizo un fraude y no nos terminó nuestro fraccionamiento", dice amargamente.
Don Jorge tiene un problema físico que lo hace caminar con dificultad, usa un bastón de apoyo, vive solo, en una cerrada cuya casa es la única habitada, y la calle no está pavimentada ni tiene alumbrado público. La obra se quedó inconclusa. La mayoría de las casas frente a la suya son obra negra.
Y es que el Fovissste pagó su casa a Graciano y Asociados, empresa que hipotecó su casa y no la ingresó al Registro Público de la Propiedad, sino en una financiera privada "Mi casa está hipotecada dos veces y haga de cuenta que yo no tengo casa. El problema es que en el Registro Público de la Propiedad aparece a nombre de Graciano y Asociados", explica Don Jorge, quien esperó ser atendido por el alcalde Luis de Villa.
"Nosotros tenemos casi un mes viniendo con el presidente municipal y ahora nos dicen que no. Yo estoy sufriendo, voy a terminar de pagar mi hipoteca y ¿quién me va a dar mis escrituras correctas?", dice Don Jorge, quien se quejó de que pasó la Administración de Rosario Castro, la de Carlos Aguilera, la de Roberto Carmona y ahora casi termina ésta de Luis de Villa y nadie les ayuda.
"Seguimos sufriendo, la próxima Administración que venga no va a conocer nuestros problemas y tenemos que volver de nueva cuenta a iniciar el proceso para que nos conozcan. Es una cosa de nunca acabar, exigimos como ciudadanos de Lerdo que nos tomen en cuenta. Cómo cuando andan de candidatos sí van para darnos una mísera de bolos y una despensita, y ya con eso nos quieren comprar, pero este problema es lo que nos preocupa y no nos resuelve ninguno", dijo.
