Así quedó el vehículo que manejaba Fernando Alonso. (EFE)
El Gran Premio de Australia fue una carrera de contrastes para Esteban Gutiérrez; si bien su coequipero Romain Grosjean logró terminar en los puntos en el debut de la escudería Haas, los desencuentros lo persiguieron durante la carrera y todo terminó tempranamente con un gran susto debido a un aparatoso choque.
La competencia no inició de la mejor forma; tras largar desde el fondo de la parrilla, le comunicó a su equipo que tenía un problema en el motor. A pesar de eso se mantuvo en pista y pudo avanzar hasta la posición 14, incluso rodó 12 por un momento.
Empezaba a desarrollar su carrera cuando recibió un contacto trasero por parte de Fernando Alonso, quien sacó la peor parte en un aparatoso accidente, inclusive se temió lo peor por algunos minutos en los que no respondió.
La carrera acabó para ambos terminó ahí, pero Gutiérrez estaba más preocupado por lo ocurrido hasta que lo vio salir caminando.
"Me dio mucho miedo ver cómo quedó el coche de Fernando, cuando lo vi por los espejos lo que hice fue salirme lo más rápido que pude del coche y me fui directamente hacia él porque sentí la preocupación de que estuviera bien y fue un alivio que así fuera, eso fue lo más importante", narró al llegar a pits.
Al serle cuestionado por la situación, señaló que todo iba bien, pero pasó tan de prisa que para nada se esperaba ese contacto, que lo tomó por sorpresa.
"Salí de la curva 2, el tenía mejores neumáticos porque venía saliendo de pits, no en ese momento, pero recientemente, y cuando llegué a la curva simplemente frené para tomar y todo fue sorpresiva, solo lo vi volando hacia el lado izquierdo mío", apuntó.
