No se hacen daño

Los equipos más goleadores de la actual temporada en la Concacaf Liga Campeones, simplemente estuvieron sin puntería. Santos Laguna empató anoche sin goles ante el Galaxy de Los Ángeles, durante el partido de ida de los cuartos de final en la Concachampions, jugado en el StubHub Center, de Carson, California. La serie se definirá el próximo martes en el estadio Corona, donde se disputará el duelo de vuelta a las 21:00 horas, con Santos obligado a ganar con cualquier marcador para avanzar a la semifinal.

Apenas iniciando el encuentro, transcurrido el primer minuto en el cronómetro, el Galaxy realizó el aviso inicial por medio de un cabezazo del gigante belga Jelle Van Damme, pero Agustín Marchesín respondió con una espectacular atajada tendiéndose hacia su izquierda para enfriar el ambicioso inicio del cuadro local, que tardó en encontrar el ritmo de juego, evidenciando que aún están en búsqueda del funcionamiento óptimo, pues aún no empiezan su participación dentro de la temporada de la Major League Soccer.

Santos trató de contrarrestar la fortaleza física del cuadro californiano con toques cortos que les permitían conservar la posesión de la pelota, y de paso calmar los ánimos de los dueños de casa, que llegando al cuarto de hora tuvieron una nueva chance con un tiro libre de frente al marco, pero el ensayo del mexicano Giovani dos Santos fue bien atajado por Marchesín, quien sin problemas recorrió su arco para quedarse con el balón sin otorgar rebote. El entrenador Bruce Arena plantó dos líneas bien definidas en media cancha y en defensa, complicando el accionar ofensivo de los Guerreros, que intentaron con Bryan Rabello y Néstor Calderón, pero tuvieron poco espacio para crear acciones de peligro en el marco de Dan Kennedy.

El irlandés Robbie Keane y el africano Emmanuel Boateng ensayaron par de disparos de larga distancia, pero ninguno tuvo suerte para vulnerar el arco de Marchesín, quien fue de los santistas más activos durante los primeros cuarenta y cinco minutos, aunque sin jugadas que realmente lo exigieran a fondo. La respuesta de los laguneros, que vistieron su uniforme en gris, llegó durante los últimos segundos del primer lapso, cuando el zaguero Néstor Araujo conectó un testarazo que contuvo bien Kennedy para mantener la igualada.

Para la segunda mitad Santos mostró una actitud diferente, convencidos de que podrían hacer el gol que les diera la ventaja y de una vez por todas comenzar a definir la eliminatoria. Los Guerreros siguieron manteniendo el control de la pelota con toques a ras de pasto, mientras que Galaxy batallaba para hacerse de la posesión del balón, aunque cuando lograban recuperar, tenían en mente profundizar para llegar con prontitud al marco contrario. El chileno Rabello paró la pelota con el pecho en el vértice del área y la prendió de media vuelta, pero el guardameta atajó recostando con tranquilidad.

El encuentro cayó en un bache de emociones, con un Galaxy escaso de imaginación y "punch" para inquietar a Marchesín, y mientras que los Guerreros tampoco pisaron demasiado el área rival, con todo y que Zubeldía hizo ingresar a Javier "Chuletita" Orozco, tratando de ser más agresivo en ofensiva. La mejor oportunidad para los laguneros fue con un remate potente de Jesús Molina tras un tiro de esquina, el volante santista prendió de aire la pelota y la dirigió hacia el poste izquierdo de Kennedy, pero ahí estaba Giovani para desviar con el costado, cerca de meter la mano y provocar el penal, sin embargo, el árbitro hondureño Armando Castro no consideró que hubo intención del volante de los californianos.

El mismo Molina se encontró de cara al gol en una pelota en diagonal que peinó Carlos Izquierdoz, pero Jesús no pudo hacer un segundo contacto con el balón al cerrar a segundo palo, y el volante santista terminó golpeándose con el poste para recibir asistencia médica, aunque se incorporó para continuar en el encuentro. Ya en el tiempo de compensación, el argentino Diego González se encontró con un rechace en la media luna, pero su disparo de derecha fue demasiado desviado del arco californiano, decretando el empate final y dejando en suspenso la definición de la serie.