El jugador más valioso del Pro Bowl, Russell Wilson (i) posa para la fotografía con Michael Irvin y el trofeo de ganadores. (AP)
Russell Wilson lanzó tres pases de anotación en la primera mitad y el Equipo Irvin aplastó el domingo 49-27 al Equipo Rice en el Pro Bowl, que resultó semejante a un espectáculo aeronáutico.
Los dos equipos se combinaron para 10 pases de anotación y 800 yardas por aire.
Wilson, astro de los Seahawks de Seattle y el primer jugador seleccionado para conformar los equipos en este juego de estrellas, encabezó ofensivas de anotación en tres de las primeras cuatro posesiones del equipo dirigido por Michael Irvin en el Aloha Stadium. El quarterback lanzó pases de anotación de 14 y dos yardas a Julio Jones y Devonta Freeman, de los Falcons de Atlanta, en el primer cuarto.
Al comienzo del segundo, Wilson conectó un envío con Todd Gurley, corredor de los Rams de Los Ángeles, para un avance de 10 yardas hasta las diagonales.
Wilson fue elegido como el Jugador Más Valioso del encuentro a la ofensiva. A la defensiva, el honor correspondió a otro jugador de los Seahawks, Michael Bennett.
Teddy Bridgewater, de Minnesota, y Jameis Winston, de Tampa Bay, añadieron pases de touchdown por el Equipo Irvin. Allen Robinson, de Jacksonville; Delanie Walker, de Tennessee; Darren Sproles, de Filadelfia, y DeAndre Hopkins, de Houston, lograron recepciones de anotación.
Travis Kelce, tight end de Kansas City, atrapó dos envíos de anotación por el equipo que comandó Jerry Rice. Jarvis Landry, de Miami, logró también una recepción de touchdown, mientras que Doug Martin, de Tampa Bay, anotó mediante un acarreo.
Dominique Rodgers-Cromartie, de los Giants de Nueva York, logró dos de las seis intercepciones del Equipo Irvin.
Las festividades del medio tiempo incluyeron un desfile de jugadores de escuelas secundarias locales. Marcus Mariota, quarterback novato de los Titans de Tennessee y nacido en Honolulú, marchó a la vanguardia de los alumnos de su alma máter, Saint Louis, durante el desfile, y se llevó la ovación de los 50.000 espectadores que llenaron el graderío.
Fue la 35ta vez en que el Pro Bowl se disputó en el Aloha Stadium. La primera fue en 1980.
Asimismo, fue la tercera ocasión en que este partido no consiste en un enfrentamiento entre la Conferencia Americana y la Nacional, sino entre equipos combinados, que definen los entrenadores en turno, leyendas de la NFL.
El año pasado, el encuentro se realizó en Glendale, Arizona. La NFL no ha determinado cuál será la sede del próximo Pro Bowl, aunque tiene la opción de volver a Hawai.
