Clinton sí hizo contrastes implícitos con Sanders a través de sus declaraciones, particularmente en la experiencia que ella tiene en seguridad nacional. (ARCHIVO)
Hillary Clinton disminuyó un poco el sábado sus mordaces ataques contra Bernie Sanders, reenfocándose en los precandidatos presidenciales republicanos y en su propia experiencia en el gobierno del presidente Barack Obama al presentar sus últimos argumentos antes de las primarias de Iowa.
Su adversario demócrata culpó al "dinero de Wall Street" de alimentar los golpes que ha recibido de ella.
Clinton buscó además ejercitar su fortaleza organizacional con importantes grupos demócratas, organizando un estridente mitin con líderes laborales y sindicatos de trabajadores que han apoyado su precandidatura.
"Ustedes van a formar parte de mi gobierno", prometió. "No se van a quedar afuera mirando hacia adentro".
Clinton y Sanders se opacaron mutuamente el sábado a lo largo del este de Iowa, luego de que efectuaron eventos en las mismas áreas con sólo horas de diferencia. Ambos precandidatos planearon pasar la mayor parte de la próxima semana en Iowa en su búsqueda de iniciar las votaciones primarias con una victoria en el estado.
Sanders comparó su rivalidad con Clinton a la contienda de ella con Obama en las primarias de Iowa en 2008, que Obama ganó en su camino a la presidencia a pesar de un bombardeo de críticas a sus propuestas y experiencia. Clinton terminó en tercer lugar en el estado.
"El pueblo de Iowa vio a través de esos ataques entonces y va a mirar a través de esos ataques nuevamente", dijo Sanders. "El pueblo de Iowa sabe que muchos de esos ataques provienen de un súper comité de acción política financiado por dinero de Wall Street, y el pueblo de Iowa no va aceptar eso, yo creo".
El ascenso de Sanders en las encuestas ha sacudido a Clinton, llevándola a lanzar una oleada de críticas contra el senador federal de Vermont, a quien ella ve como inelegible y proponente de políticas poco realistas. Pero la acalorada retórica ha preocupado a algunos partidarios de Clinton, quienes temen que podría desalentar a votantes indecisos.
La ex secretaria de Estado adoptó un tono más suave el sábado, refiriéndose a Sanders como su "estimado adversario". Dejó a un lado la mayor parte de sus críticas directas a Sanders, a excepción del tema de control de armas y de atención a la salud, al tiempo que emitió una advertencia contra la exhortación del senador para establecer un sistema financiado por el gobierno.
Clinton sí hizo contrastes implícitos con Sanders a través de sus declaraciones, particularmente en la experiencia que ella tiene en seguridad nacional.
Algunos partidarios demócratas prominentes de Clinton también estuvieron haciendo campaña a su favor en el estado, incluidos los senadores Tim Kaine de Virginia, Cory Booker de New Jersey y Kirsten Gillibrand de Nueva York. Ella se reuniría también con líderes de importantes grupos defensores de los derechos de las mujeres y los homosexuales.
