Lamentable. La pequeña quedó en la tumba de su abuela.
Junto a los restos de su abuela quedó sepultada la pequeñita Sofía, de un año y tres meses de edad, cuya vida fuera arrancada de manera inexplicable por su propia madre, Susana, quien ayer fue trasladada al Centro de Reinserción Social (Cereso) de Durango, luego que el Ministerio Público formulara la imputación por el delito de homicidio agravado.
En la placa de mármol de la tumba donde fue depositado el cuerpo inerte de la niña, todavía sólo aparece el nombre de la señora María Enriqueta, sepultada en 2012 en el Panteón Puerta del Cielo, ubicado sobre la carretera Gómez Palacio-Jiménez.
La pequeña Sofía Enriqueta tenía una hermana mayor, de siete años, quien ahora se encuentra resguardada por la Procuraduría de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, del sistema del Desarrollo Integral de la Familia (DIF), de esta ciudad.
La delegada de la citada Procuraduría, Claudia Rocío Ibarra, mencionó que la pequeña de siete años, cuyo nombre se reservó, se encuentra en buenas condiciones físicas y mentales, sin huellas de violencia y se realizan los estudios pertinentes para determinar a qué familiar será entregada la menor.
Como se informó en su momento, la niña Sofía fue reportada como secuestrada por parte de dos sujetos que viajaban a bordo de un automóvil Volkswagen tipo Jetta, de acuerdo a lo informado por su madre, el pasado domingo al mediodía, cuando acudió a las instalaciones de la Vicefiscalía de la región Laguna Durango, a denunciar el supuesto robo de la pequeña, lo que generó la Alerta Ámber por parte de las autoridades, para tratar de localizarla.
Luego de declarar ante las autoridades y evidenciar algunas contradicciones, la mujer fue sometida a intenso interrogatorio y ya en la madrugada del lunes, terminó por confesar que la había matado y tirado en una parte del Centro de Gómez Palacio, motivo por el cual quedó detenida y ayer se formuló la imputación en el Palacio de Justicia, así como la vinculación a proceso, al renunciar al término constitucional, siendo luego trasladada al Cereso de Durango, como medida cautelar dictada por la jueza de Control.
¿Cómo la mató?
Al descubrir el cuerpo sin vida de la niña, ésta se encontraba atada de manos y pies y envuelto su rostro con cinta de color café, dentro de una bolsa negra, en el relleno sanitario de Gómez Palacio.
El Ministerio Público de Delitos Contra la Vida y la Integridad Corporal, manifestó que según las declaraciones de Susana, con un cinto de color café le ató el cuello hasta ahorcarla, el domingo como a las 8:30 horas, aprovechando que los demás familiares dormían dentro de la casa.
La mujer se llevó a la pequeña ya sin vida, dentro de una bolsa negra y envuelta en una cobija amarilla y pidió un taxi para que la llevara al poblado Vergel, donde vive el padre de la pequeña y más tarde se regresó al Centro de Gómez Palacio, para luego tirarla sobre la avenida Mina, entre Zaragoza y Juárez.
