CAMOTES GLASEADOS
Después de pelar los camotes, agrégueles azúcar, mantequilla o margarina y las especias que acostumbra. Luego báñelos con jugo de piña, poniendo también una pequeña cantidad de él en el recipiente y déjelos así hasta el siguiente día. Luego cuézalos en el horno como de costumbre. Su sabor será diferente y mucho más delicioso.
DESBARATANDO COSTURAS
Después de desbaratar cualquier costura o dobladillo, extienda la prenda sobre una superficie plana y lisa, tome una hoja de rasurar de un solo filo y pásela por todos los cabos del hilo que se hayan quedado adheridos al material y que resultan tan difíciles de quitar. Trabajando del modo indicado, se formará con ellos una bolita que usted desprenderá con gran facilidad. Cuide nada más de no maltratar ni cortar la tela.
¿LE MOLESTAN LOS ZAPATOS NUEVOS?
Si los siente muy incómodos cuando acaba de comprarlos y va posponiendo su uso, rocíe un día su interior con maicena y se sentirá mucho mejor.