Segundo. De corroborarse los resultados, esta sería la segunda ocasión de un fraude ambiental.
Volkswagen engañó en las pruebas de emisión por segunda vez, informaron ayer lunes reguladores en Estados Unidos. La automotriz instaló programas en unos 10,000 automóviles diésel de motor grande para que emitieran menos contaminantes durante las pruebas que en condiciones de manejo.
La Agencia de Protección Ambiental (EPA por sus siglas en inglés) y la Junta de Recursos Aéreos de California dijeron que el fabricante alemán instaló programas para falsear los resultados de las pruebas de emisión en sus vehículos de 2014 a 2016 con motores diésel de tres litros y seis cilindros. VW admitió previamente que había falseado los resultados de las emisiones para los diésel de cuatro cilindros en 11 millones de automóviles en el mundo, incluyendo unos 500,000 en Estados Unidos.
La agencia dijo que el programa instalado en los motores diésel de seis cilindros tiene un cronómetro que hace que los automóviles funcionen de manera diferente durante las pruebas que en la calle, emitiendo menos contaminantes, dijo la agencia el lunes. Un segundo después que concluye la primera fase de la prueba, los vehículos retornan a la operación normal. Agregó que los vehículos emiten hasta nueve veces más óxido de nitrógeno que lo permitido por las normas de la EPA, dijo la agencia.
La violación abarca los modelos Touareg 2014, Porsche Cayenne 2015 y los Audi A6 Quattro, A7 Quattro, A8 y Q5 modelo 2016. Volkswagen enfrenta multas de hasta 37,500 dólares por vehículo, lo que significa que podrían agregarse hasta 375 millones de dólares a las penalidades ya anticipadas en miles de millones de dólares. La empresa ya ha apartado unos 6,700 millones de euros (7,380 millones de dólares) para pagar por el eventual retiro y reparación de los automóviles en cuestión. Los analistas creen que la cifra será mucho mayor.
"VW ha vuelto a fallar en sus obligaciones de cumplir con la ley que protege la calidad del aire para todos los estadounidenses", afirmó Cynthia Giles, administradora adjunta de la EPA. El fabricante "sabía o debió saber que el programa pasaba por alto, falseaba o desactivaba elementos del diseño del vehículo relativos al cumplimiento con las normas de emisiones de la Ley del Aire Puro", dijo la agencia.
Niega acusación
El grupo Volkswagen, el mayor fabricante de vehículos de Europa, negó ayer que su motor diésel de 3 litros V6 también incorpore un programa informático que manipula los datos de emisiones de gases contaminantes. Reaccionó en un comunicado a la nota difundida EPA de EU en la que se le acusaba de haber empleado en más motores de los hasta ahora detectados un software que reduce las emisiones solamente cuando el vehículo está en un banco de pruebas.
