Travesía. Un niño sirio refugiado carga sus maletas tras cruzar el mar.
El enviado especial de Naciones Unidas para Siria, Staffan de Mistura, afirmó ayer que de continuar en deterioro la situación en Siria hay el riesgo de que el país árabe sufra una división.
"La partición del país sería el peor escenario'', sostuvo De Mistura en rueda de prensa en Ginebra.
"Los sirios de todas las partes han dicho desde el principio que luchan por mantener la soberanía y la integridad territorial del país'', dijo De Mistura, "pero si la situación sigue deteriorándose, la realidad podría ser la partición", advirtió.
De Mistura reconoció que la división del territorio sirio ya se ve "de facto como una posibilidad y lo consideramos una tragedia'', subrayó.
Describió la situación en el país árabe como una especie de "coctel tóxico'' con tintes de Afganistán, Libia o Somalia, de ahí la necesidad urgente de iniciar un proceso político entre el gobierno liderado por el presidente Bashar al Assad y la coalición que agrupa a la oposición.
Por otra parte De Mistura señaló que la intervención militar de Rusia en Siria "ha establecido efectivamente una nueva dinámica en la situación'', razón por la que hoy martes se reunirá con su canciller Serguei Lavrov en Moscú.
Además, el enviado especial de la ONU consideró que debido a que existe una aceleración de la militarización en Siria, "debería haber al menos un mayor acceso humanitario y algunos gestos de levantar los asedios y de liberar a los presos".
Moscú inició su incursión militar en septiembre de 2012 argumentando que se enfocaría en atacar a los grupos terroristas extremistas como el EI que controla una buena parte del país y del norte de Irak.
