No comas por dos

Al estar embarazada, los cambios hormonales pueden generar ansiedad en la futura madre, lo que muchas veces se confunde con apetito, esto aunado al mito de que la mujer en esta condición debe comer por dos, con frecuencia implica consumir más calorías de las necesarias e incrementar considerablemente de peso.

El ginecólogo, César González Hernández, explica que lo ideal es que la mujer suba alrededor de 12.5 kilos, pero no menos de 9 ni más de 14, por lo que lo más conveniente es que se alimente de leche, carne, huevos, verduras y frutas, a fin de que su bebé se forme con nutrientes de buena calidad.

Señala que existe una tabla donde se multiplica el peso de la mujer por 30 y el resultado son las calorías que debe consumir durante el día, en el caso de quienes realicen muchas actividades la operación es por 35.

“Claro que se debe hacer una evaluación de cada caso en particular para poder recomendar una dieta a la embarazada, pero sí es muy importante llevar una dieta balanceada, no es necesario comer más, el problema son los carbohidratos difíciles de digerir, como los pasteles, refrescos o frituras, al final del día la nutrición es lo más importante para una mamá, que está construyendo a un bebé, siempre serán mejor los cereales, pastas, verduras, que son de más fácil digestión”, explica.

Incluso el ejercicio es recomendado, pero con moderación, a fin de evitar molestias como el dolor de espalda. El médico considera que se pueden tomar clases de gimnasia especiales para embarazadas, como el curso pricoprofiláctico, evitando ejercicios violentos o excesivos.

González señala que la ansiedad en la madre es completamente normal, ya que debe comprender que hay múltiples cambios en su organismo, físicos y sobre todo, hormonales, pero es un proceso natural.

El ginecólogo refiere que, el subir considerablemente de peso durante el embarazo puede ser indicativo de que algo no va bien con el embarazo, ya sea que la madre retiene mucho líquido, lo que puede aumentar la presión y derivar en preclamsia; o bien, que esto sea un descontrol metabólico que provoque una diabetes gestacional.

“Son los problemas más comunes para la mujer embarazada”, comenta el especialista, “la obesidad y el sobrepeso se reconocen como factores de riesgo importantes en el embarazo, la diabetes gestacional, la hipertensión, pueden complicar todo, por eso es necesario llevar el control prenatal, para verificar que el embarazo lleve un proceso normal, no porque la mujer vaya a quedar gorda o no”.

Las recomendaciones:

• Llevar una dieta balanceada.

• Subir 12.5 kilos durante todo el embarazo.

• Optar por carbohidratos fáciles de digerir.

• Llevar un adecuado control médico.

• Dormir bien.

• No fumar ni consumir alcohol.

El problema son los carbohidratos difíciles de digerir, como los pasteles, refrescos o frituras, al final del día la nutrición es lo más importante para una mamá”.

César González Hernández,

Ginecólogo