Los Tigres de la UANL avanzaron a la siguiente fase como primer lugar del Grupo 6. (Fotografía de Jam Media)
El Universitario boliviano y el Tigres mexicano buscarán hoy dar el primer golpe al abrir los octavos de final de la Copa Libertadores de América cuando choquen en Sucre, situada a 2,790 metros de altitud.
Para el Universitario, al mando del técnico boliviano Julio César Baldivieso, será el primer partido de su historia como institución en esta fase del torneo internacional.
La única baja del elenco 'capitalino', llamado así al ser Sucre la capital constitucional de Bolivia, es la de su portero titular, el chileno Raúl Olivares, por acumulación de tarjetas amarillas.
Baldivieso dijo que Juan Carlos Robles reemplazará a Olivares y no está preocupado porque el suplente ha jugado muy bien en el último tiempo y porque todo el elenco está en sintonía con el objetivo de derrotar a los Tigres, dirigidos por Ricardo Ferreti.
El Universitario, que es el único equipo boliviano que sigue en carrera en la Libertadores se impuso (0-1) el sábado como visitante ante el Nacional de Potosí, aunque sigue entre los últimos ya que está en décima posición de la liga boliviana entre doce equipos.
Tigres, que también es el único equipo mexicano que compite en el certamen, ya se encuentra en Sucre para el duelo de mañana.
El viernes, el equipo de Ferreti superó por 3-1 al Querétaro por la liga mexicana, en el que marcha como uno de los escoltas inmediatos del líder Guadalajara.
El uruguayo Egidio Arévalo, volante de Tigres, declaró a los medios que su equipo buscará el triunfo en Sucre, pero que "de últimas" también pueden llevarse un punto para definir después la serie en México.
Agregó que su equipo ya ha tenido un buen desempeño en la altitud de Bolivia porque en la primera fase de la Libertadores, derrotó (0-1) al San José jugando a 3,702 metros de altitud, en la ciudad andina de Oruro.
Aún así, sostuvo que el equipo mexicano no puede descuidarse en el estadio Patria porque cuando los jugadores están en casa siempre se hacen fuertes y los de Sucre también buscarán una victoria.
SUPER CLÁSICO EN PUERTA
El cruce entre Boca Juniors y River Plate, acérrimos rivales del fútbol argentino, era el único firmado para octavos de final de la Copa Libertadores antes de que se cerrara la fase de grupos.
Boca terminó como el mejor de los ocho primeros y River como el peor entre los ocho segundos.
Boca se clasificó con el ideal de 18 puntos en el Grupo 5 y River lo hizo en forma agónica en el 6, en el que apenas ganó un partido para cosechar un total de siete unidades.
El choque Boca-River empezó como una remota posibilidad, se fue perfilando con el correr de los partidos, quedó casi sellado el jueves cuando Wanderers de Uruguay goleó 3-0 a Zamora de Venezuela y terminó por confirmarse más tarde cuando Corinthians de Brasil empató 0-0 con San Lorenzo de Argentina por el Grupo 2. Al "Timao" le resta un partido y a lo sumo puede terminar con 16 puntos, dos menos que los Xeneizes.
Claro que Boca hizo poco antes lo suyo, cuando venció 2-0 a Palestino de Chile en su estadio La Bombonera, dentro del mismo grupo en el que se clasificó Wanderers.
"Va a ser duro y desgastante", subrayó el técnico de Boca Rodolfo Arruabarrena sobre el encuentro con River. "En el fútbol argentino nos conocemos todos, así que tanto ellos como nosotros vamos a tratar de aprovechas los defectos y virtudes de cada uno. Por eso siempre se prefiere un equipo del exterior".
Se disputarán tres superclásicos en diez 10 días: el 3 de mayo Boca será local por la liga argentina; tres días después River será el anfitrión en el duelo de ida por la Libertadores y el 13 en La Bombonera se definirá el pase a los cuartos de final.
TRIUNFOS
acumuló Tigres en la fase de grupos y dos empates, ambos con River Plate.
