El consumo excesivo de sal genera, entre otras afecciones, hipertensión arterial -elevación persistente de las cifras en la presión-. A su vez, se pueden ocasionar enfermedades cerebro-vasculares, infartos isquemias, insuficiencias cardíacas e insuficiencia renal.
El consumo excesivo de sal podría generar problemas de salud como diabetes mellitus, hipertensión arterial, cáncer de colon, próstata y mama, afirmó el nutriólogo Miguel Bonilla Hernández.
El especialista de la Unidad de Medicina Familiar 51 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) dijo que la falta del cuidado de la salud, por parte de la población, ha generado que existan casos de obesidad hasta en cuarto grado, en quienes prácticamente pesan lo doble de lo que deberían.
Señaló que “el consumo excesivo de sal genera, entre otras afecciones, hipertensión arterial -elevación persistente de las cifras en la presión-. A su vez, se pueden ocasionar enfermedades cerebro-vasculares, infartos isquemias, insuficiencias cardíacas e insuficiencia renal”.
Refirió que el 70 por ciento de la población en México, mayor de 20 años, padece obesidad y sobrepeso, al igual que el 30 por ciento de los adolescentes, 20 por ciento de escolares y 10 por ciento de los preescolares.
Abundó que, además del consumo excesivo de sal, existen algunos alimentos que inciden en la elevación de los niveles de presión arterial como son: salchicha, chorizo, longaniza, mayonesa, catsup, salsa inglesa, consomé, carne de puerco, mariscos, vísceras, menudo, botanas, refresco, galletas, chocolates, manteca y mantequilla.
Aseveró que una de las medidas importantes e iniciales en pro de la buena salud es el hecho de retirar los saleros de las mesa, consumir alimentos con bajo contenido de grasa e incluir frutas y verduras en la alimentación diaria.
Así como evitar el tabaquismo, medir el consumo de alcohol y fomentar la activación física, lo cual se puede iniciar con caminatas de 15 minutos al día, y posteriormente aumentar el tiempo.
Refirió que es importante consumir cereales porque las fibras que contienen impiden que el organismo absorba tantas grasas, por lo que también recomendó consumir frijoles, garbanzos y lentejas, que son fuente de proteína y de fibra.
Aclaró que es mejor preparar los alimentos, hervidos, asados o a la plancha y disminuir el consumo de miel, mermelada y jalea por su alto contenido de azúcar.
Finalmente, invitó a la población a acercarse a su Unidad de Medicina Familiar para recibir atención y orientación por parte del departamento de nutrición a fin de mejorar los hábitos alimenticios e incidir en la prevención de enfermedades como las mencionadas.
