Alcancía. Este nuevo año es la oportunidad para inculcar a los pequeños el hábito del ahorro, por lo que es bueno iniciar desde hoy.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) recomienda aprovechar este fin de año para enseñar a los infantes el hábito del ahorro.
Ello, con el fin de comenzar un nuevo año con un aprendizaje que les servirá toda la vida.
En su revista "Proteja su dinero", el organismo describe tres prácticos consejos para enseñar a niños y niñas a administrar su dinero, como contarles cuentos con el fin de transmitirles una moraleja, en este caso la importancia del ahorro.
La Condusef explica que los cuentos se transmiten de generación en generación, por lo que se vuelve una herramienta útil para enseñar a los hijos de manera divertida el hábito del ahorro, a la vez que ellos en un futuro transmitirán el mensaje a sus seres queridos.
Es importante procurar que los cuentos no sean largos, que se utilice un lenguaje adecuado a la edad del menor y además sugiere realizar preguntas para confirmar que la información se está entendiendo.
Otra manera de inculcar este importante hábito es con el ejemplo, pues los niños son perceptivos y tienden a imitar lo que observan a su alrededor, incluyendo los comportamientos de sus padres, por lo que es necesario en este proceso de enseñanza ser coherente con lo que se enseña y lo que se hace.
El organismo agrega que al momento de utilizar un cajero automático, se explique al menor que ese dinero es producto de su trabajo y que apartará algo de él como ahorro para una emergencia y no gastará todo.
Otro momento para aleccionar a los más pequeños sobre la importancia del ahorro es invitarlo a elaborar la lista del supermercado, pues así se dará cuenta que, antes de comprar, deben poner por escrito lo que verdaderamente se necesita para que no gastar dinero "a lo loco", les rinda más y lo puedan ahorrar.
De igual forma, la Condusef aconseja poner en práctica la información procesada por el menor, utilizando por ejemplo una meta de ahorro, como la compra de un juguete, un dulce o la entrada a algún sitio que desee visitar.
Para esto, se le debe enseñar a ahorrar en una pequeña alcancía cada cierto tiempo, con el fin de hacer de esta práctica un hábito constante y conseguir una meta, y conforme lo desarrolle, el siguiente paso es abrir una cuenta de ahorro formal.
En la actualidad existen diversas opciones en las que por lo general el monto de apertura es bajo y son un gran instrumento financiero para familiarizarse con otros conceptos como la tarjeta de débito, el saldo, cajero automático y banco.
