El concierto se enmarca en el "Chinese democracy tour", que da nombre a su reciente producción editada en 2008 y cuyas ventas alcanzaron los 11 millones de copias a nivel mundial."íBuenas noches!, muchas gracias", fueron algunas de las palabras del vocalista, quien se dedicó junto con la agrupación a hacer lo suyo, acompañado de un "show" de pirotecnia, luces y cinco pantallas gigantes.A pesar de los cambios en la agrupación, Axl y su compañeros, los guitarristas Ron "Bumblefoot" Thal, DJ Ashba y Richard Fortus, el bajista Tommy Stinson, el baterista Frank Ferrer, así como los teclistas Dizzy Reed y Chris Pitman realizaron un recorrido por más de 20 canciones que dejaron a sus fans enloquecidos con cada uno de ellos.Cerca de 19 mil asistentes recibieron a la agrupación con una rechifla y abucheo, otros decidieron abandonar el "Domo de Cobre" antes de que saliera el grupo. No obstante, una vez en el escenario y con los primeros acordes, parece que el público se olvidó de la espera y aplaudió cada uno de los temas que ofreció Guns N´Roses.El primero de dos conciertos estuvo lleno de energía e intensidad, con la voz de Axl Rose, quien con temas clásicos logró reconquistar a sus fieles fanáticos, a los que hizo esperar más de tres horas. Cerca del final el vocalista se resbaló y por poco cae del escenario.El rock duro que marcó a una generación en los 80 regresó a México con Guns N´Roses y dio la "bienvenida a la jungla", pero debido a las excentricidades de la banda que salió después de la medianoche al escenario del Palacio de los Deportes, algunos seguidores abandonaron el recinto antes.