El presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, afirmó hoy que 'nadie más que Dios' le impedirá mantenerse en el cargo hasta el próximo día 27, cuando asumirá el nuevo Gobierno, y advirtió de que este recibirá las finanzas públicas en situación 'alarmante'. (EFE)
El presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, afirmó hoy que "nadie más que Dios" le impedirá mantenerse en el cargo hasta el próximo día 27, cuando asumirá el nuevo Gobierno, y advirtió de que este recibirá las finanzas públicas en situación "alarmante".
Micheletti también reafirmó que las Fuerzas Armadas cumplieron con un "deber constitucional" en sus actuaciones relacionadas con el derrocamiento de Manuel Zelaya el 28 de junio pasado, aunque no se refirió específicamente a la expulsión de este último del país, por lo cual el Ministerio Público (MP) ha acusado a la cúpula militar.
"No voy a renunciar y no voy a abandonar el cargo, yo soy respetuoso a la Constitución y a las leyes, a mí el Congreso Nacional me eligió del 28 de junio al 27 de enero", expresó Micheletti en una entrevista con la radio HRN.
"Ese tema está discutido, yo creo que nadie, absolutamente nadie, más que Dios me puede quitar la opción de llegar al 27 de enero", subrayó ante preguntas sobre demandas de la comunidad internacional para que renuncie antes de esa fecha y así facilitar el reconocimiento para el nuevo presidente, Porfirio Lobo.
"No hay forma ni internacional ni nacionalmente (para que) alguien me pida que me retire de un mandato constitucional que yo estoy desempeñando, sería un ignorante o un intento de irrespetar de nuevo la Constitución (hacer) un llamado de esa naturaleza", apuntó.
Micheletti pidió a quienes le exigen que renuncie "hacer reflexión; hay que leer, hay que asesorarse bien para que no se estén diciendo las tonteras que se dicen sobre ese tema particular".
Sobre el proceso abierto el miércoles por la Fiscalía contra la Junta de Comandantes de las Fuerzas Armadas por haber expulsado a Zelaya del país, el gobernante de facto reiteró su defensa de las actuaciones de los militares en la crisis política.
Las Fuerzas Armadas "no hicieron más que cumplir, cumplir con el deber constitucional que demanda la Carta Magna del país, que demandan las leyes y las autoridades del país", expresó.
Según el Gobierno de facto, los militares derrocaron a Zelaya en cumplimiento de una orden de captura emitida por un juez de la Corte Suprema de Justicia como parte de un proceso incoado por el MP contra el depuesto mandatario por impulsar una consulta declarada ilegal para promover una Asamblea Constituyente.
Micheletti comentó que "sobrarán los abogados conspicuos" y los "aspectos legales" para apoyar a los militares "en la defensa" ante la justicia.
"Y estaremos nosotros en todo momento, como amigos permanentes, en la defensa tanto de nuestras Fuerzas Armadas como de nuestra Policía", añadió.
Advirtió, asimismo, de que Lobo recibirá las finanzas públicas en situación "alarmante", lo que atribuyó a "la irresponsabilidad del Gobierno anterior", que dejó muchas deudas, entre otros problemas que lo obligaron a recortar gastos en estos últimos meses.
"Es sumamente alarmante la situación", aunque se espera una pronta mejora en la recaudación de impuestos y confió "que no va a ser tan grave la situación que va a recibir el señor Lobo", manifestó.
"Hemos tenido que hacer erogaciones increíbles, multimillonarias, de pagos de propaganda, de pagos de medios de comunicación, de pagos de construcciones, y es increíble la irresponsabilidad con que se actuó", afirmó Micheletti.
También relató que, en la reunión que mantuvieron el miércoles, le reclamó al subsecretario de Estado adjunto para el Hemisferio Occidental de EU., Craig Kelly, porque su país revocó visados a hondureños sólo por ser "amigos" suyos o de su Gobierno.
"Le decía yo (a Kelly): Aquí se ha hecho una injusticia quitándole la visa a un montón de ciudadanos simple y sencillamente por ser amigos. Le dije: Quítenme la visa a mí, soy yo el responsable, y si no me la quieren devolver, que no me la devuelvan nunca", refirió Micheletti, sin mencionar qué otros asuntos trató con el enviado estadounidense.
