El director de Seguridad Pública Municipal (DSPM) de Torreón, Primo Francisco García, admitió que al finalizar el mes de diciembre pasado se tuvieron que dar de baja a elementos de la corporación por diversos motivos, principalmente por no cumplir con lo establecido en el Artículo 88 del Sistema Nacional de Seguridad Pública y Artículo 133 y 114 del Sistema de Seguridad Pública del Estado de Coahuila.
También informó que cuatro cadetes que recién habían egresado en diciembre de la Academia de la Policía, serán dados de baja por no cumplir con los exámenes toxicológicos que estableció posteriormente el Centro de Evaluación y Control de Confianza de Coahuila (C3) en Ramos Arizpe.
Fue durante este mes de enero que la propia Contraloría Municipal de Torreón informó, a través del portal de transparencia del Ayuntamiento, que hasta el 31 de diciembre pasado había un total de 17 servidores públicos que habían sido objeto de sanciones y bajas definitivas por faltas al Sistema Nacional de Seguridad Pública, al Sistema de Seguridad Pública del Estado de Coahuila, además del propio Reglamento Interno de la DSPM de Torreón, entre otros, de esa cifra 13 personas desempeñaban funciones como elementos en activo de seguridad.
Cuestionado al respecto, Primo García admitió que aunque sí ocurrieron dichas bajas, no se trata de una situación que genere un impacto en la operatividad de la corporación, misma que mantiene sus acciones de vigilancia sin mayor modificación.
"Lo que sí le puedo decir es que hay procedimiento, incluso exámenes de permanencia, de control y confianza, si reprueban pues bueno, se tienen que retirar de la institución... sí hubo (bajas), pero no tengo ahorita el número", explicó.
¿No impacta esa situación entonces?
"Por su puesto que no, pues es el proceso que tienen los elementos y las corporaciones de seguridad, que están sujetas a un permanente, vaya, escrutinio de parte de las autoridades encargadas".
Respecto a los cadetes que no aprobaron las pruebas antidopaje de parte del C3 en Ramos Arizpe, García señaló que no pueden continuar en la corporación, por lo que destacó la utilidad de tales exámenes y evaluaciones en cada parte del proceso profesional policial.
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Primo García admitió que aunque sí ocurrieron dichas bajas, no se trata de una situación que genere un impacto en la operatividad de la corporación, misma que mantiene sus acciones de vigilancia sin mayor modificación. (FERNANDO COMPEÁN)
