El peleador bajacaliforniano es flanqueado por su entrenador, Cristian Amador y por el promotor Héctor Sánchez Arredondo.
Armado con la seguridad que le otorga haber realizado una gran preparación, el boxeador mexicano, Israel "JIGA" González, viajó el pasado lunes rumbo al archipiélago japonés para encarar la eliminatoria mundialista por el campeonato de la Federación Internacional de Boxeo (IBF, por sus siglas en inglés), de peso Súper Mosca, que está en poder del filipino, Jerwin Arcajas.
GRAN ILUSIÓN
El próximo sábado 28 de diciembre en la EDION Arena de Osaka, Japón, Jesús Israel González Acevedo se meterá a la casa de su oponente, el nipón, Sho Ishida, en un duelo que promete grandes emociones, pues el púgil oriundo de Cabo San Lucas, Baja California Sur, saltará con toda la intención de "morirse en la raya" con tal de obtener una nueva oportunidad para contender por un campeonato del mundo.
Muy seguro de salir con la diestra en alto, Israel González, antes de partir rumbo a su cita eliminatoria, hizo una para en la Ciudad de México, donde entrenó, sin descuidar ningún detalle, al grado de declarase cerca de dar el peso límite de la división (52.163 kilogramos / 115 libras), por lo que aseguró que viaja tranquilo y con grandes deseos de que llegue el momento para ascender al encordado en pos de una nueva oportunidad titular.
Acompañado de su entrenador Cristian Amador y su representante, Héctor Sánchez Arredondo, titular de la promotora Eventos Especiales Rocky (EER), partió rumbo al archipiélago japonés consciente de que un triunfo le daría la posibilidad de volver a encarar al tagalo Jerwin Arcajas.
