Un total de 537 niños con vínculos con el grupo radical ya han sido entregados a sus países de origen. (ARCHIVO)
Las autoridades iraquíes anunciaron este martes la entrega a su país de origen de 64 niños de nacionalidad uzbeka cuyas familias pertenecían al grupo terrorista Estado Islámico (EI), en el marco de las repatriaciones de mujeres e hijos de los yihadistas que Irak lleva a cabo desde el año pasado.
El Ministerio de Exteriores informó en un comunicado de que ha contado con la colaboración de varios organismos, incluido el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), para repatriar a los 64 menores y entregarlos a las autoridades de Uzbekistán.
Asimismo, instó a otros países a que se coordinen con el Gobierno iraquí a través de los canales diplomáticos para repatriar a los niños de familias vinculadas al EI, que están ahora bajo la supervisión del Servicio de Prisiones Iraquíes, o de aquellos menores que ya han cumplido condena en Irak.
Según la nota, un total de 537 niños con vínculos con el grupo radical ya han sido entregados a sus países de origen hasta el momento.
El pasado mes de julio, el ministerio informó de que se habían llevado a cabo repatriaciones a Rusia, Tayikistán, Azerbaiyán, Alemania, Francia, Georgia, Bielorrusia, Finlandia, Ucrania y Turquía, a las que se suma Uzbekistán.
Después de que las fuerzas iraquíes recuperaran el control de la ciudad de Mosul (norte), que fue el principal bastión del EI en este país, arrestaron a 1,800 niños y mujeres emparentados con combatientes de diferentes países de Europa oriental y occidental, Estados Unidos, Turquía, Rusia, China, Tailandia y otros países.
Las mujeres y niños fueron llevados a campamentos donde se limitó su libertad de movimiento, y organizaciones de derechos humanos han denunciado el maltrato sufrido por estas personas y la falta de acceso a un juicio justo.
Mientras, los yihadistas extranjeros están siendo juzgados en el país árabe y algunos de ellos, condenados.
El EI irrumpió en Irak a mediados de 2014 y conquistó amplias zonas del norte y el oeste, de donde fue expulsado a partir de 2016 hasta su derrota definitiva en diciembre de 2017.
Sin embargo, a día de hoy el grupo radical todavía tiene presencia en algunas áreas y comete atentados de forma esporádica.
