El presidente de la Asociación Mexicana de Suicidología, A.C., Quetzalcóatl Hernández Cervantes. (ESPECIAL)
La tasa de mortalidad por suicidio en Coahuila es de las mas altas del país junto con los estados de Baja California, Campeche y Tabasco.
En Coahuila, la incidencia es de 6.3 muertes por cada 100 mil habitantes, en promedio en estos estados se presentan 10 muertes por cada 100 mil habitantes y el sector de la población mas propenso se encuentra entre los 15 y los 24 años de edad.
"En el tema del suicidio no existen causas. Existen factores que interactúan y aumentan la probabilidad, como la personalidad, problemas de salud u otros detonantes. El principal factor de riesgo es que el sistema de salud no tiene una infraestructura que dé una respuesta al problema", dijo el presidente de la Asociación Mexicana de Suicidología, A.C., Quetzalcóatl Hernández Cervantes, pues en todo el país solo existe un hospital psiquiátrico infantil y se ubica en la ciudad de México.
No obstante, el suicidio es 100 por ciento prevenible y ésta no es una labor que se haga solo en casa, es un problema que tiene que ver con situaciones de tipo económico, cultural y social.
"El nivel socioeconómico no tiene nada que ver la mortalidad por suicidio. Las estadísticas indican que por cada mujer que se suicida hay al menos 4 hombres", explicó Hernández Cervantes. Dijo que los que están en mayor riesgo son los hombres y la forma que seleccionan para terminar con su vida es el ahorcamiento.
Pero existen señales de alerta, indica el especialista, algunos escriben cartas, regalan sus posesiones preciadas o lo anuncian abiertamente.
"La amenaza suicida tiene que ver con mucho sufrimiento y no saber cómo lidiar con esa situación", indica.
Las tres acciones básicas ante una situación de este tipo son preguntarle a la persona si piensa hacerlo, escucharla sin dar consejos, ni regañarla y referir a la persona a la ayuda especializada.
En el caso de que ya haya ocurrido la muerte, existe una posvención (trabajo psicológico) para las personas a las que sobreviven, familiares, amigos o círculo cercano.
"Es necesario hablar abiertamente del tema, tratarlo como un tema de salud no como un tabú ni algo prohibido o vergonzoso pues son temas que corresponden a la condición humana. El suicidio es un tema de todos", acotó Hernández.
