Ahora podría necesitar un trasplante de córnea. (INTERNET)
Miyako Aiko-Murray es una joven británica que quedó ciega luego de meterse a nadar en el mar con sus lentes de contacto puestos y ser golpeada por una ola.
Según informa el Daily Mail, Miyako, de 20 años, se encontraba de vacaciones en Malta; cuando la ola la golpeó, entró agua a su ojo derecho, provocando irritación en él.
El dolor no cedió y tuvo que acudir varias veces al hospital, donde eventualmente los médicos le diagnosticaron queratitis por Acanthamoeba, una infección que daña la parte frontal del ojo por una bacteria, afección más común entre personas que usan lentes de contacto.
Le recomendaron gotas especiales que debía colocarse cada hora durante un mes, lo que la obligó a ausentarse de su trabajo y eventualmente ser despedida, pero a pesar de seguir acudiendo a sus citas con el médico regularmente, un día en marzo de este año despertó sin poder ver nada, producto de una infección secundaria que causó una cicatrización corneal.
"Nunca me había sentido tan deprimida en mi vida. Finalmente tuve que dejar de estudiar y de hacer actividades diarias […] Todo lo que puedo hacer es rezar", cuenta ella.
Ahora se prepara para la posibilidad de necesitar un trasplante de córnea, por lo que su amiga Pearl Murray ha creado una página web de recaudación de fondos por donaciones, para pagar por los gastos médicos.
DA.
