(EL UNIVERSAL)
Las 24 Horas de Le Mans, las 500 Millas de Indianápolis y el GP de Mónaco son fechas que todo amante de los autos tiene marcadas en su calendario. En el plano de la industria nacional, desde hace cinco años se puso en la mira a la mitad de 2019 como una de las fechas más trascendentes para el futuro de la manufactura automotriz de nuestro país.
Y es que, en 2014, BMW anunció que construiría su planta de producción más moderna a nivel global en el estado de San Luis Potosí y que ésta produciría el auto más importante en el portafolios de la marca alemana: el Serie 3.
La fecha llegó y las primeras unidades de este icónico sedán han salido de la línea de producción potosina para ser ofrecidas en el mercado nacional y también ser exportadas al mercado de Estados Unidos, Canadá, Latinoamérica y Asia.
Estos ejemplares son pertenecientes a la séptima generación de uno de los modelos que, a través de 44 años de historia, se ha colocado como el referente de tecnología, confort, lujo y desempeño para toda marca que quiera vender un sedán familiar.
Por esa razón hemos manejado el nuevo Serie 3 para evaluar qué tan bien cumple con las expectativas de manejo que se le exigen y, al mismo tiempo, evaluamos si la manufactura mexicana está a la altura de uno de los productos que históricamente se relacionan al lujo y al refinamiento.
La nueva generación del Serie 3 (séptima en la historia del modelo) es diferenciada de sus antecesoras bajo la nomenclatura G20. Ésta fue presentada en el Auto Show de París del año pasado y, desde ahí, pudimos ver que los cambios en este modelo eran vastos.
El nuevo Serie 3 sigue la tendencia de casi todos los autos nuevos en el mercado global y, en términos generales, se puede reducir a que es mucho más grande.
La distancia entre sus ejes ha crecido 41 milímetros contra la versión que reemplaza y, en ese mismo tenor, el largo del eje trasero y delantero han aumentado 21 milímetros y 43 milímetros, respectivamente.
Sin embargo, el empleo de una nueva plataforma de este modelo le ha permitido a los ingenieros de BMW reducir 55 kilogramos del peso total del Serie 3 y, a la par de la disminución en su centro de gravedad, la nueva generación es ahora más aerodinámica.
La reconfiguración en el BMW Serie 3 ha servido para que la nueva estructura que lo compone sea 55% más rígida que la presente en la generación anterior, beneficiando a la seguridad y a las sensaciones de manejo en condiciones de pista.
Para fortalecer las tareas de manejo deportivo que caracterizan a este sedán, aún en su versión de menor desempeño, ha sido agregado un diferencial activo proveniente de modelos M Sport que interpreta la potencia que debe de tener cada llanta, según las condiciones de superficie que se le presenten.
A la par de las reinvenciones en el "hardware" del Serie 3, los alemanes han puesto particular atención al "software" en aras de volver al G20 el referente de tecnología y conectividad en el mundo premium.
Como novedades en materia tecnológica, el nuevo Serie 3 destaca por ser el primer ejemplar en la historia de la marca en contar con un nivel de manejo autónomo de grado 2.
Esto significa que el conductor puede prescindir del uso de sus manos para controlar diversas operaciones en el auto como un manejo a velocidad constante o maniobras que complican el manejo diario.
Entre ellas destacan los asistentes de reversa, en donde la inteligencia artificial del Serie 3 memoriza los últimos 50 metros de recorrido que se hicieron para estacionar un auto y, de manera inversa, los ejecuta para sacar al auto de espacios reducidos.
Uno de los avances más interesantes en la interfaz tecnológica del Serie 3 se encuentra fuera del auto ya que, a través de la vinculación del sistema operativo que viene instalado en el auto y una app instalada en el smartphone del dueño, éste puede observar en tiempo real los alrededores del vehículo, gracias a las cámaras que dan una perspectiva de 360°.
Asimismo una de las características distintivas que está presente en el Serie 3, y tendrán los BMW más nuevos, es que la interfaz de conectividad opera a través de una "nube en línea" que guarda la información del conductor, vía username y password, para mantener sus preferencias de manejo sin importar que éste cambie de auto.
Es decir, el conductor de un BMW Serie 3 nuevo podrá subirse a la X3 M e ingresar su información para que el otro auto se adapte a cuestiones tan básicas como la posición de manejo y estaciones de radio preferidas, hasta la configuración de la suspensión, capacidad de entrega del motor o eficiencia.
Más allá de la tecnología y el alto nivel de ésta, en BMW tienen claro que el principio que distingue a sus autos radica en el manejo y la oferta para cada tipo de cliente en la actualidad.
Por esa razón, la nueva generación del Serie 3 se ofrecerá en una serie de versiones que buscan atraer a distintos tipos de mercados.
Inicialmente, se comercializará la versión 330i, la cual equipa un motor de cuatro cilindros en línea y 2.0 litros de desplazamiento que genera 285 caballos de fuerza. Este modelo está equipado con tecnología TwinPower Turbo y un acoplamiento de transmisión automática de ocho velocidades.
Como versión deportiva, la marca alemana ofrecerá más adelante la variante con denominación M340i. Ésta incluye un motor de seis cilindros de 3.0 litros que genera 387 caballos de fuerza y 369 libras-pie de torque.
También se ofrecerá una versión de menor desempeño denominada 320i con potencia de 184 caballos de fuerza y, finalmente, se integrará una variante denominada 330e.
Esta destaca por tratarse de la primera versión híbrida de la nueva generación del Serie 3 y mejorar sus virtudes de ahorro de combustible. Por ejemplo, el manejo bajo la configuración meramente eléctrica ha pasado de 30 a 60 kilómetros en la nueva versión.
A lo largo de su existencia, el Serie 3 ha sido posicionado como un auto que combina el lujo de un sedán que puede ser empleado por un exitoso hombre de negocios y el manejo deportivo de alguien que gusta de manejar rapidamente en carretera.
Por esa razón para la presentación oficial de las unidades salidas de la nueva planta de San Luis Potosí, BMW nos invitó al Autódromo Hermanos Rodríguez.
Ahí tuvimos la oportunidad de comprobar qué tan prácticas son las tecnologías de manejo semiautónomo y, al mismo tiempo, exprimir todo el desempeño presente en las reconfiguraciones mecánicas.
Para la prueba fueron puestas a nuestra disposición una serie de ejemplares con la configuración base 330i. Luego de unos ejercicios donde se nos demostraron las mejoras en maniobrabilidad del nuevo Serie 3, la marca "abrió la pista" y pudimos vivir a profundidad el manejo deportivo de esta nueva generación.
