La pieza será subastada en julio. (INTERNET)
En 1964 un vendedor de antigüedades en Edimburgo compró por 5 libras, que es alrededor de 124 pesos, una pieza de un juego de ajedrez antiguo.
Se quedó guardada en su cajón por 55 años hasta que recientemente su nieta decidió desempolvarla y la llevó a evaluar a la casa de subastas Sotheby’s, donde la identificaron como una de las cinco piezas faltantes de los históricos Lewis Chessmen.
Sotheby’s dice en un comunicado: “Estas piezas de ajedrez han inspirado grandes historias y cuentos populares, como las piezas de ajedrez mágicas en Harry Potter y la piedra del hechicero de Rowling. Pero con sus diferentes vestidos y gestos, las piezas también han ofrecido a los investigadores ideas sobre las civilizaciones medievales. Hoy en día, todas las piezas de ajedrez son de un color marfil pálido, pero el tono oscuro de Lewis Warder claramente tiene el potencial de ofrecer una visión valiosa y fresca de cómo este ajedrez de Lewis pudo haber lucido en el pasado. Ciertamente, hay más en la historia de este guardián que aún no se ha contado, sobre su vida en los últimos 188 años desde que fue separado de sus compañeros de ajedrez”.
Se cree que las piezas fueron talladas en Trondheim, Noruega, a finales del siglo XII o principios del XIII antes de dirigirse a la Isla de Lewis, donde se descubrieron 93 de ellas en 1931.
Hay 82 de estas piezas que se exhiben en el Museo Británico y 11 en el Museo Nacional de Escocia. Un caballero y cuatro guardias aún faltan para completar los juegos de ajedrez. Este guardián es el primero de estas piezas faltantes encontrado desde que se hizo el descubrimiento original de los sets.
Ahora la pieza será subastada el 2 de julio y se espera que su valor llegue al millón de libras, es decir, casi 25 millones de pesos.
DA.
