DeMarcus Lawrence tuvo 25 capturas de mariscal de campo en las últimas dos temporadas con los Vaqueros de Dallas.
DeMarcus Lawrence tiene el contrato a largo plazo que sintió que se merecía después de que el ala defensiva estrella de los Vaqueros de Dallas jugó la temporada pasada con la etiqueta de jugador franquicia.
Lawrence y los Vaqueros acordaron un contrato de cinco años por 105 millones con 65 millones garantizados.
Las partes tenían hasta el 15 de julio para elaborar un contrato a largo plazo después de que el club utilizara nuevamente la etiqueta de franquicia en el jugador. Hace un año, Lawrence firmó la oferta de 17.1 millones de inmediato. Esta vez no lo hizo, y había estado posponiendo la cirugía de hombro mientras estaban las negociaciones.
Obtener un acuerdo antes del draft significa que Lawrence puede participar en actividades fuera de temporada, en espera de una cirugía de hombro.
Había una gran probabilidad de que Lawrence, quien cumplirá 27 años a fines de este mes, se hubiera mantenido alejado del equipo sin un contrato.
El valor total del contrato solo está por detrás de el conseguido por Khalil Mack de Chicago (141 millones) y Von Miller de Denver (114 millones) entre defensivos que presionan al mariscal de campo Ambos son tres veces All-Pros. Mientras Lawrence ha estado en los últimos dos Pro Bowls, y todavía está buscando su primera selección al All-Pro.
Lawrence ganó 17.1 millones bajo la etiqueta de franquicia la temporada pasada después de terminar empatado en el segundo lugar en la NFL con 14.5 capturas de mariscal en 2017.
Tuvo otra temporada de dos dígitos con 10.5 el año pasado, y es considerado uno de los mejores defensivos que presionan al mariscal.
El acuerdo se produce aproximadamente una semana después de que Dallas adquirió al ala defensiva Robert Quinn en un intercambio con Miami. Se espera que Quinn esté en el lado opuesto a Lawrence a menos que Randy Gregory sea reintegrado de su cuarta suspensión por abuso de sustancias.
La carrera del exjugador de Boise State comenzó lentamente, con ocho de sus nueve capturas de sus primeras tres temporadas en su segundo año.
Luchó contra las lesiones al comienzo de su carrera y fue suspendido cuatro juegos para comenzar la temporada 2016 por violar la política de la NFL sobre mejorar el rendimiento.
La temporada más saludable de la carrera de Lawrence fue su mejor campaña, cuando tuvo 10.5 capturas en los primeros siete juegos. Tiene 34 capturas en 64 juegos en su carrera.
En la temporada 2015, Lawrence sumó 55 tacleadas, luego en 2017 tuvo 58 y su mejor fue la pasada con 64 tacleadas, 15 de ellas para pérdida de yardaje.
